Tres diputados bolivianos postularon al presidente Alberto Fernández para el premio Nobel de la Paz por “salvar la vida de Evo Morales”, cuando el ex mandatario boliviano fue recibido y estuvo un tiempo en Argentina en condición de asilado político.
La iniciativa de los legisladores pretende reconocer al mandatario argentino por su participación en "la recuperación de la institucionalidad democrática en Bolivia”.
Tres diputados bolivianos postularon al presidente Alberto Fernández para el premio Nobel de la Paz por “salvar la vida de Evo Morales”, cuando el ex mandatario boliviano fue recibido y estuvo un tiempo en Argentina en condición de asilado político.
Se trata de una iniciativa de Grobert Nogales Grageda, Santos Mamani Espinoza y Gualberto Arispe Maita. En una carta dirigida al Comité Nobel Noruego los tres definieron a Fernández como “un jurista que siempre estuvo comprometido con la causa y la práctica de los derechos humanos en la Argentina y en América Latina” y sostuvieron que “su actitud decidida y valiente permitió salvar la vida del ex presidente Evo Morales Ayma y del ex vicepresidente Álvaro García Linera”.
“Esta actitud también permitió la recuperación de la institucionalidad democrática y poner fin a la persecución que sufrieron los pueblos originarios durante el Golpe de Estado que ocurrió el 10 de noviembre de 2019”, agregaron.
Evo Morales renunció aquella fecha en medio de una fuerte crisis política y social desencadenada por un informe de la OEA que reveló presuntas irregularidades que no fueron confirmadas en las elecciones generales realizadas un mes antes y se asiló en México, invitado por Andrés Manuel López Obrador. Por aquel entonces, este último y Fernández “acordaron extremar los esfuerzos para que Morales y sus colaboradores pudieran salir de Bolivia”, donde “estaban resguardados de un grupo irregular” que los buscaban y “temían por sus vidas”, repasaron los legisladores.
Previo a su aterrizaje en Argentina, el ex presidente boliviano viajó a Cuba para una consulta médica, según informó Graciela Montaño, quien fuera su ministra de Salud y quien luego también lo acompañó a Buenos Aires. Sin embargo, los detalles de su estadía en La Habana se mantuvieron bajo total reserva durante un largo tiempo hasta que recientemente el propio Morales admitió: “Cuando yo fui a Cuba no fue por temas de salud, fui a una reunión de planificación con Cuba y Venezuela, una reunión de alto nivel a ver cómo retomábamos la democracia”.
Finalmente, el 12 de diciembre de 2019 arribó a Ezeiza. “Aterrizaron esta mañana en el país. Les he dado asilo político para que entren y ellos luego pidieron ser refugiados. En las próximas horas, cesará la condición de asilo y asumirán la de refugiados”, informó en su momento el canciller Felipe Solá.
“Evo Morales y otros perseguidos consiguieron abrigo en la Argentina. Que se mantuviera con vida y liderase el regreso a la Constitución fue un factor de enorme importancia en las elecciones” que se celebraron el 18 de octubre del año pasado y en las que se impuso Luis Arce Catacora, sostuvieron los diputados.
Al enumerar los argumentos de la postulación al Nobel, también refirieron a los libros dedicados a los DDHH bajo la autoría del presidente argentino y subrayaron su gestión como jefe de Gabinete durante las presidencias de Néstor y Cristina Kirchner, entre 2003 y 2008.
Respecto del mandato actual de Fernández, resaltaron la aprobación del aborto legal y gratuito, al igual que “la profundización del proceso de democratización enfatizando la necesidad de mejorar el funcionamiento de la Justicia y promulgando una legislación avanzada que permitiera terminar con la discriminación e igualdad”.
“Los bolivianos fuimos beneficiarios directos de esa recuperación de valores y conductas”, consideraron Nogales Grageda, Mamani Espinoza y Arispe Maita. Y acotaron: “Nuestra democracia le debe mucho al presidente Fernández y a su política de solidaridad activa con el Estado de Bolivia y con sus ciudadanos y ciudadanas”.