El Litoral
Doce países latinoamericanos se reunirán este lunes y martes en Quito para analizar, desde un punto de vista más técnico que político, la situación creada por el éxodo masivo de venezolanos hacia otros países del área.
El Litoral
Estas son algunas claves del fenómeno al que medios internacionales comparan ya con la diáspora siria y que tiene como protagonista central a uno de los países más ricos en recursos naturales del subcontinente, el mismo que hasta hace unos años paradójicamente fuera receptor masivo de inmigrantes por motivaciones económicas.
¿Por qué se van los venezolanos de su país?
Por una crisis económica que se refleja en que se espera una inflación anual de un millón por ciento, lo que ha mermado los ingresos y ha hecho que las familias no se puedan proveer de los recursos básicos. A eso se suma que el fortalecimiento del Gobierno de Nicolás Maduro y la debilidad de la oposición ha desterrado esperanzas de cambios prontos.
¿Cuántos venezolanos se han ido en los últimos meses?
Según los cálculos de los departamentos de Migración de otros países, cerca de 1,6 millones en una población calculada antes en unos 32 millones. Analistas temen que el flujo pueda aumentar si no se logran soluciones prontas.
¿A dónde se van los venezolanos?
Fundamentalmente a otros países latinoamericanos, comenzando por la vecina Colombia, en la que ya hay más de 900.000 inmigrantes de esa nacionalidad. El Perú, con más de 400.000 llegados, es el segundo mayor receptor, lo que se explica por facilidad para un Permiso Temporal de Permanencia que ofreció el entonces presidente Pedro Pablo Kuczynski para debilitar a Maduro.
¿Cuál es el papel de Ecuador, anfintrión de la cita de esta semana?
Se ha convertido en un corredor entre Colombia y el sur del continente. Han entrado más de 620.000 venezolanos, pero unos 500.000 han seguido rumbo hacia el Perú, Chile, Argentina y en menos número Uruguay o Paraguay.
¿Y hacia Brasil, también vecino geográfico?
El problema se ha concentrado en el norte, donde hay unos 4.400 venezolanos, según cifras recientes, aunque entre 700 y 800 buscan entrar o tratan de entrar por día. Con tropas en la frontera y ataques xenófobos a campamentos en la localidad de Pacaraima, el problema se ha tornado especialmente grave a pesar de ser número inferior al de otros vecinos.
¿Qué otros destinos buscan los venezolanos?
Países fundamentalmente latinoamericanos y del Caribe, como Panamá, Costa Rica, México, República Dominicana y Aruba. Solo los de mayores recursos han optado por el sueño europeo.
¿Qué dice el Gobierno de Maduro?
Que todo es un montaje manejado mediáticamente por Estados Unidos y sus aliados. Según ellos, las cifras están dramáticamente infladas y las legiones de venezolanos que hacen largas caminatas son preparadas para la televisión. El Gobierno buscó llevar de regreso a algunos inmigrantes establecidos en el Perú mediante un vuelo fletado, pero solo 97 aceptaron.
¿Qué enfrentan los venezolanos emigrantes?
Enormes dificultades para conseguir emplos formales. Los ingenieros que trabajan de meseros o los administradores de empresa que venden golosinas en los buses son ya parte del paisaje colombiano o peruano y cada vez más en todas latitudes. Los que ingresan al sector formal normalmente lo hacen en condiciones más precarias que los nacionales, Además, requieren alojamiento, educación para los niños y adolescentes y sistemas de salud y obtener medios para enviar a sus familias en Venezuela.
¿Ha habido explosiones de xenofobia?
Las más graves fueron las de Brasil. En otros países hay quejas y algunas reyertas aisladas, pero también ha habido una extendida comprensión. En Ecuador se han convocado movilizaciones de rechazo y en el Perú un candidato a alcalde de Lima, Ricardo Belmont, saltó al segundo lugar en las encuestas con un discurso agresivamente antivenezolano. En algunos sectores, especialmente los populares, se ve a los recién llegados como una competencia no deseada.