Viernes 14.5.2021
/Última actualización 12:39
El pasado 5 de mayo, Lucas Villa, el estudiante de la Universidad Tecnológica de Pereira y líder juvenil, recibió ocho disparos en el cuello, tórax, pierna y en el cráneo, mientras protestaba pacíficamente en el viaducto de la ciudad, producto de los cuales murió días después. Ahora los ojos están sobre su familia, específicamente sus hermanos, que han denunciado amenazas en su contra.
Su hermana Sidssy Uribe, en diálogo con Caracol Radio, aseguró que un hombre los interceptó recientemente y los amenazó de muerte, razón por la cual interpusieron una denuncia ante las autoridades que ya corre su trámite. “Estamos preocupados por nuestra seguridad. La Alcaldía ni la Gobernación se han hecho cargo de nosotros, nos han invisibilizado”, señaló Uribe, quien exige que los dejen seguir dejando vivo el legado de Lucas sin “que el miedo nos corrompa”.
Por ahora se conoce que la Fiscalía General de la Nación señaló a la banda criminal ‘La Cordillera’, brazo de uno de los carteles de droga del departamento de Risaralda, son los presuntos responsables del homicidio de Villa. Las investigaciones señalan que su muerte se habría dado porque las protestas, las cuales también lideraba el estudiante, habrían impactado en las rentas ilegales de dicho grupo ilegal.
Según informes, ‘La Cordillera’ es una de las bandas más peligrosas del Eje Cafetero y lideran el negocio del narcotráfico en dicha zona, además de ser presuntamente responsables de varios asesinatos y amenazas en el norte del Valle, Quindío y especialmente en Pereira. Entre sus jefes estuvo Carlos Mario Jiménez, alias ‘Macaco’, excomandante del Bloque Central Bolívar de las autodefensas y quien hoy paga una condena de 33 años en Estados Unidos por narcotráfico y terrorismo, reporta Semana.
GentilezaA partir de estas y otras capturas, la banda se estaría debilitando. También han sido judicializadas 15 personas que pertenecían a dicho grupo por delitos como homicidio agravado, desplazamiento forzado, tráfico, fabricación, porte ilegal de armas, concierto para delinquir agravado, tráfico, fabricación o porte de estupefacientes. También fue capturado en 2011 José Fabián Guzmán Patiño, alias ‘Niño Fabián’, señalado homicida.
El pasado lunes se declaró la muerte de Lucas por parte del Hospital Universitario San Jorge. “El paciente no presentó ninguna respuesta neurológica luego de suspender la sedación (...) nuestros sentimientos solidarios de pésame su familia y personas allegadas”, señaló Juan Carlos Restrepo, gerente del centro médico.
Por su parte, el alcalde de Pereira, Carlos Maya, cuestionado por convocar, días previos al atentado, “a los miembros de la seguridad privada para hacer un frente común junto a la Policía y el Ejército para recuperar el orden en la seguridad ciudadana”; afirmó a la revista Semana, que él no promovió “la justicia por mano propia” por parte de civiles. Según dijo el mandatario a esa revista, debido a que el viaducto de Pereira era el lugar escogido para terminar las manifestaciones en la ciudad, él le había solicitado a la Policía que conservara distancia para evitar enfrentamientos. Por eso, según él, esa noche los uniformados estaban a unas cuadras del lugar.
Este jueves se dio el sepelio del estudiante de 37 años de edad, que inició con una marcha desde el viaducto hasta la UTP, donde se hizo la velación de su cuerpo previo a la cremación. En ese espacio el rector de la institución, Luis Fernando Gaviria, rector de la universidad, le entregó a los papás de Villa el diploma póstumo en Ciencias del Deporte y Recreación, gracias a que tenía más del 77 por ciento de créditos aprobados.