La misteriosa desaparición de María Belén Zerda, una turista argentina de 38 años, mantiene en vilo a Cancún y genera preocupación tanto en México como en Argentina.
El departamento presentaba señales de abandono. Hallaron su celular envuelto en cinta y notas manuscritas que podrían ser clave en la investigación. La búsqueda ya lleva varios días.
La misteriosa desaparición de María Belén Zerda, una turista argentina de 38 años, mantiene en vilo a Cancún y genera preocupación tanto en México como en Argentina.
La mujer fue vista por última vez el domingo 6 de abril en el municipio de Benito Juárez y, desde entonces, no se sabe nada de su paradero. Su ausencia encendió las alarmas y dio lugar a una búsqueda intensa que aún no ofrece resultados concretos.
Zerda había viajado a México por motivos personales y se alojaba sola en un departamento en Cancún. Desde su desaparición, familiares y allegados iniciaron una campaña para visibilizar el caso y pedir colaboración.
En este marco, las autoridades activaron un protocolo de búsqueda urgente, y se ordenaron distintas medidas para intentar reconstruir sus últimos movimientos.
Durante un procedimiento de inspección realizado en el lugar donde se hospedaba María Belén, se encontraron indicios que despertaron inquietud. El departamento estaba desordenado, con papeles esparcidos por el piso y señales de haber sido abandonado de forma repentina.
Uno de los hallazgos que más llamó la atención fue su teléfono celular, que estaba envuelto en cinta y acompañado por varias notas manuscritas. Si bien no trascendió el contenido de esos escritos, las autoridades los consideran elementos clave en la investigación.
También se determinó que algunos objetos personales permanecían en el lugar, lo cual refuerza la hipótesis de una desaparición repentina, sin planificación previa. La escena no mostró signos evidentes de violencia, aunque el contexto general planteó diversas hipótesis que aún se evalúan.
La mujer mide aproximadamente 1,70 metros, tiene tez clara, contextura delgada y cabello rubio largo. Al momento de su desaparición vestía una blusa negra sin mangas, short de jean claro y sandalias blancas con verde. Como seña particular, posee un lunar de unos 3 milímetros en el tobillo izquierdo.
La denuncia formal por su desaparición fue presentada el 10 de abril. Desde entonces, se llevan adelante distintas acciones para dar con su paradero, como el análisis de cámaras de seguridad y entrevistas a vecinos de la zona. La búsqueda continúa activa, y se solicita a cualquier persona que pueda aportar datos concretos que se comunique con las autoridades locales.
Mientras avanza la investigación, crece la expectativa por obtener alguna pista que permita saber qué le ocurrió a María Belén Zerda. El hallazgo de sus pertenencias, el estado del departamento y la falta de noticias mantienen el caso abierto y en observación permanente.
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