Una semana después de imponer dos tandas de sanciones a funcionarios chinos, el Gobierno de Estados Unidos rechazó este lunes todos los reclamos territoriales de Beijing sobre el Mar de la China Meridional, un tema considerado estratégico por la potencia asiática.
"Hoy estamos fortaleciendo una política estadounidense en una cuestión en disputa y vital de la región: el Mar de la China Meridional. Lo dejamos bien claro: Los reclamos de Beijing sobre recursos offshore sobre la mayor parte del Mar de la China Meridional son completamente ilegales, al igual que su campaña de bullying para controlarlo", anunció el secretario de Estado, Mike Pompeo.
"La República Popular de China no tiene fundamentos legales para imponer su voluntad en la región. Beijing no ha ofrecido ninguna base legal coherente para su reclamo de 'la línea de los nueve puntos' en el Mar de la China Meridional, desde que lo anunció en 2009", continuó el comunicado firmado por el miembro del gabinete estadounidense y difundido por el canal CNN.
La llamada Línea de los nueve puntos es una demarcación extraoficial que reclama China y que, de ser aceptada, le garantizaría soberanía sobre la mayor parte de ese mar, de sus islas y de los recursos que se encuentran debajo el agua.
Para China, este reclamo es considerado estratégico para mantener su hegemonía sobre la región o, en otras palabras, sobre sus vecinos, muchos de ellos aliados declarados de Estados Unidos que han invitado formalmente a las fuerzas militares de esa potencia occidental en esas aguas.
"El mundo no permitirá que Beijing trate al Mar de la China Meridional como su imperio marítimo. Estados Unidos apoya a sus aliados y socios del Sudeste Asiático en su defensa de sus derechos soberanos de los recursos offshores", concluyó el comunicado del Departamento de Estado.