Durante una conferencia de prensa en San Petersburgo ante medios extranjeros, el dirigente ruso Vladímir Putin advirtió este miércoles que las entregas de armas occidentales a Ucrania, país que está en conflicto con Rusia desde hace más de dos años debido a una invasión ordenada por él mismo, constituyen un "paso muy peligroso", sobre todo si quienes las envían también "controlan" su uso.
"Entregar armas a una zona de guerra siempre es malo", dijo el líder político ruso, cuyo país recibe -y lo hace desde el inicio de los combates prácticamente- drones iraníes para atacar ciudades ucranianas, así como ha pactado el apoyo y la asistencia mutua con Corea del Norte en cuestiones castrenses. Además, el Kremlin cuenta con el velado y siempre desmentido asesoramiento militar chino, hecho negado de manera persistente por los actores involucrados.
Mirá tambiénJoe Biden autorizó a Ucrania a atacar dentro de Rusia con municiones estadounidensesVolviendo sobre las palabras de Putin sobre lo proveedores de armas a Kiev, explicó que también es "más peligroso aún" si quienes las entregan, "no sólo entregan armas sino que también las controlan". "Ese es un paso muy serio y muy peligroso", declaró Putin, que además afirmó que si Alemania llega a enviar misiles Taurus, de largo alcance y capaces de golpear Moscú, las relaciones ruso-alemanas quedarían definitivamente destruidas. "Ahora cuando hablan de que también enviarán misiles que atacarán objetivos en territorio ruso, eso, claro está, destruye definitivamente las relaciones ruso-alemanas", señaló.
Putin recordó que la aparición de tanques germanos en Ucrania (los Leopard 2) causó en su momento un "shock" en la sociedad rusa, "que tenía una actitud muy positiva respecto a Alemania". Este punto le dio pie para criticar abiertamente al gobierno alemán, al que acusó de "no defender los intereses de Alemania". "Está claro que Alemania no es totalmente soberana, pero los alemanes existen. Y hay que pensar al menos un poco en sus intereses", dijo el autócrata ruso.
Entre el cinismo y la picardía
En el marco de su alocución, Putin advirtió que Rusia podría entregar misiles de largo alcance a terceros países que podrían usar esas armas para atacar "puntos estratégicos" en territorio de los aliados occidentales que suministran armas a Ucrania, en lo que calificó como una respuesta "simétrica". El dirigente usó la conferencia igualmente para repetir su discurso de que "no fue Rusia quien comenzó la guerra, sino Occidente", entre otras razones con el expansionismo de la OTAN.
A juicio del líder del Kremlin, quien en todo momento mostró una actitud distendida y casi jovial, la guerra comenzó cuando la ciudadanía ucraniana se levantó en 2014 contra la decisión del gobierno de Kiev (que en ese momento en realidad estaba a cargo de un "títere" suyo), de alejarse de Europa para acercarse a Moscú. Justamente, la caída de ese dirigente prorruso, Viktor Yanukovich, fue seguida por la decisión rusa de anexar ilegalmente la Crimea ucraniana y luego apoyar una rebelión prorrusa en el este de Ucrania.
"Todos creen que Rusia comenzó la guerra en Ucrania", dijo, con marcado cinismo y algo de picardía discursiva, el dirigente que ordenó la invasión de otro país bajo el rótulo de "Operación Especial". "Me gustaría enfatizar que nadie en Occidente, en Europa, quiere recordar cómo comenzó realmente esta tragedia... nadie", agregó. Además, Putin aseguró que ya hay instructores de países occidentales en Ucrania y "están sufriendo bajas" (sin ofrecer evidencia de ello), a la vez que añadió que las bajas ucranianas en el conflicto son al menos cinco veces mayores que las rusas, otra vez sin ofrecer pruebas.
También se refirió a Donald Trump, y atribuyó los problemas legales del ex mandatario estadounidense a una "lucha política interna" entre demócratas y republicanos antes de las elecciones presidenciales de noviembre. "Es obvio en todo el mundo que el procesamiento de Trump por cargos basados en hechos que tuvieron lugar hace años, sin evidencia directa, es una mera utilización del sistema judicial en una lucha política interna", aseguró.
"Debemos estar preparados para una eventual guerra en 2029"
Con esas palabras se manifestó el ministro de Defensa de Alemania, el socialdemócrata Boris Pistorius, este miércoles, al presentarse en una sesión de la Cámara Baja en Berlín. "Es necesario reforzar las capacidades operativas de las Fuerzas Armadas germanas para que estén preparadas para una eventual guerra en 2029, para lo cual es fundamental asegurar finanzas, material y personal", argumentó el funcionario federal.
"Debemos estar preparados para la guerra en 2029, pero también debemos actuar como elemento disuasorio para evitar que ocurra lo peor", enfatizó Pistorius. "En caso de emergencia necesitamos hombres y mujeres jóvenes que puedan defender este país", afirmó. Por ello, consideró necesario reformular el servicio militar, que es voluntario desde 2011.
Pistorius defendió la creación de "una nueva forma de servicio militar", que "no puede estar completamente libre de obligaciones", es decir no puede ser totalmente voluntario. Anteriormente, el ministro de Defensa había señalado su interés de reintroducir la obligatoriedad, al menos de forma parcial, para asegurar un contingente militar acorde a las exigencias de defensa actuales.
De esta forma, Pistorius presentará ante el Parlamento la próxima semana su plan para la reformulación del servicio militar. Pese a una ofensiva comunicacional, en 2023 la cifra de personal de las Fuerzas Armadas volvió a reducirse, llegando a 181.500 soldados. Ante ello, el ministro busca ensayar nuevas formas para atraer personal, sobre todo teniendo en cuenta la guerra de agresión rusa en Ucrania. No obstante ello, reiteró que Alemania no enviará soldados a Ucrania.
Dejanos tu comentario
Los comentarios realizados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Evitar comentarios ofensivos o que no respondan al tema abordado en la información.