La OTAN reaccionó ante la amenaza rusa de utilizar armas nucleares
Desde el gobierno de Vladimir Putin se iniciaron pruebas con el K-329 Belgorod, el portador de la llamada “Arma del Apocalipsis”. Los mandatarios de occidente advirtieron que “cualquier uso tendrá consecuencias serias para Rusia”.
El submarino K-329 Belgorod, portador del arma nuclear más poderosa. Crédito: Ministerio de Defensa de Rusia
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En las últimas horas creció la tensión en Europa luego de que la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte) alertara que Rusia inició pruebas con el submarino nuclear ruso ‘K-329 Belgorod’, portador del misil nuclear Poseidón, también llamado como el “Arma del Apocalipsis”.
La movilización de esta herramienta se da en un contexto de avanzada del ejército ucraniano, que continúa recuperando territorios y que el sábado retomó el control de Lyman, un sector clave sobre el este.
En contraparte, Rusia anexó tras referendos a Donetsk y Lugansk, en el este, y Jerson y Zaporiyia en el sur, los cuáles fueron repudiados y considerados como “ilegales” por países occidentales.
Con la creciente tensión en el este europeo, se supo mediante trascendidos que el nuevo submarino fue botado en julio y ahora se habría sumergido en aguas del Ártico tras su posible implicación en el sabotaje de los gasoductos Nord Stream.
En respuesta al movimiento ruso, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, manifestó que “cualquier uso de armas nucleares tendrá consecuencias serias para Rusia”. La misma también es en referencia a la amenaza de Vladimir Putin acerca del empleo de ojivas atómicas tácticas para proteger los nuevos confines autoproclamados con las anexiones de las regiones ucranianas.
Stoltenberg advirtió, que el organismo está listo para responder de manera firme y unida cualquier ataque deliberado a sus infraestructuras críticas. Reiteró, sin embargo, que el procedimiento o cualquier decisión a tomar deberá ser acordada previamente por todos sus miembros integrantes
En cualquier caso, los aliados continuarán apoyando a Ucrania, que continúa efectuando progresos en el terreno, como lo demuestra la reconquista de Lyman.
Jens Stoltenberg, secretario general de la OTAN. Crédito: Yves Herman / Reuters
El secretario general de la OTAN había calificado el viernes la anexión de cuatro regiones de Ucrania a Rusia como una operación “ilegal e ilegítima”.
“Los aliados de la OTAN no reconocen ni reconocerán ninguno de esos territorios como parte de Rusia”, dijo en la sede de la alianza militar, en Bruselas. En Moscú, el presidente Vladimir Putin firmó el viernes pasado la anexión formal a Rusia de Donetsk y Lugansk, en el este de Ucrania, además de Kherson y Zaporiyia, en el sur, luego de referendos realizados hace una semana.