El Litoral
Se trata de los últimos recursos en segunda instancia del ex presidente contra su condena por corrupción, y abrió la puerta a un posible encarcelamiento en las próximas semanas.
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DPA
Un tribunal brasileño rechazó este domingo los últimos recursos en segunda instancia del ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva contra su condena por corrupción, y abrió la puerta a un posible encarcelamiento en las próximas semanas.
Con el rechazo esperado a las últimas apelaciones de la defensa del ex presidente, el tribunal de apelación de segunda instancia de Porto Alegre (TRF4) podría autorizar en principio en breve una posible ejecución de la pena de prisión de más de 12 años de cárcel para Lula, decretada en enero.
Uno de los abogados del ex mandatario, Cristiano Zanin, sugirió sin embargo de inmediato la posibilidad de presentar un recurso más en la propia segunda instancia. "Podemos identificar algunas omisiones", citó el portal "Globo" a Zanin.
"Lo que vamos a definir es si el (próximo) recurso va a ser presentado todavía ante este tribunal", agregó el letrado. Según el diario "Folha de Sao Paulo", la defensa podría contar con una vía jurídica más en segunda instancia, aunque es muy improbable que la corte acepte el recurso.
El caso jurídico de Lula se ha vuelto más complejo según avanza, posiblemente también porque es inédito en la historia reciente de Brasil. No se descarta que el drama en torno al popular ex mandatario mantenga en vilo al país durante meses.
El fallo de hoy era esperado, ya que el tribunal de Porto Alegre es el mismo que confirmó la condena de Lula en enero y la aumentó de nueve años y medio de cárcel a los actuales 12 años y un mes.
El ex mandatario, de 72 años, puede apelar a su condena hasta ahora en libertad. El TRF4, sin embargo, ya había autorizado en enero que la pena de prisión pueda ser ejecutada tras el fin del caso en segunda instancia.
La mejor opción para Lula en los próximos días es un recurso extraordinario de "habeas corpus" para evitar la prisión presentado por su defensa ante la máxima corte del país, el Supremo Tribunal Federal (STF). La corte debe decidir el 4 de abril sobre ese recurso.
Un fallo contra Lula en el Supremo y el final de la segunda instancia abriría la puerta al cumplimiento de la pena de cárcel.
Independientemente del recurso de "habeas corpus", se espera que los abogados del ex mandatario intenten llevar las apelaciones contra la condena hasta las últimas instancias posibles, el Superior Tribunal de Justicia y otra vez el STF.
El juez Sérgio Moro, a cargo de los procesos del caso "Lava Jato" ("Lavado de autos"), condenó el año pasado al ex jefe de Estado (2003-2010) por cargos de que aceptó de la constructora OAS la reforma de un apartamento de lujo en la costa de Sao Paulo, a cambio de favorecer a la empresa en sus negocios con Petrobras.
La petrolera estatal está en el centro del escándalo "Lava Jato", que salpica desde hace más cuatro años a gran parte de las élites políticas brasileñas.
El posible encarcelamiento de Lula amenaza con generar un terremoto político en el país sudamericano, ya que el ex líder obrero e ícono de la izquierda quiere volver a ser candidato en las elecciones presidenciales de octubre y es actualmente favorito en los sondeos con hasta el 36 por ciento de los apoyos.
El escenario electoral tras una posible salida de Lula de la carrera electoral es incierto. El segundo favorito en las encuestas es el radical de derechas Jair Bolsonaro, que se ha beneficiado de la frustración política de amplios sectores de la población debido a los escándalos de "Lava Jato".
El caso salpica a decenas de diputados, gobernadores, funcionarios públicos y poderosos empresarios, y generó una grave crisis institucional en la mayor economía de América Latina en los últimos años. A ello se sumó una fuerte recesión.