El Gobierno colombiano de Gustavo Petro atraviesa esta semana intensas jornadas políticas y de movilización social, que se manifestará en una serie de marchas a favor y en contra del mandatario.
Las protestas evidencian que los cambios prometidos por el mandatario durante su campaña se enfrentarán con tensiones políticas y una economía en declive.
El Gobierno colombiano de Gustavo Petro atraviesa esta semana intensas jornadas políticas y de movilización social, que se manifestará en una serie de marchas a favor y en contra del mandatario.
El ciclo de movilizaciones fue inaugurado ayer, aunque con escasa concurrencia, con el "gran paro nacional indefinido", una movilización que intentó nuclear principalmente a sectores de derecha y fue apoyado por parte del gremio de comerciantes.
Las marchas evidencian que los cambios prometidos por el mandatario durante su campaña se enfrentarán a partir de ahora con tensiones políticas, una economía en declive y una fuerte pulseada por el poder.
El resultado quedará a la vista en las elecciones locales y regionales de octubre, el primer test electoral de Petro.
Para es lunes la manifestación, convocada bajo el lema "Por nuestra libertad por y para Colombia", es también organizada por sectores de derecha local a los que se espera se una el gremio camionero en algunas regiones y puertos.
La consigna es el rechazo a las reformas tributarias, de justicia y salud y el aumento de la canasta básica y los peajes en el país.
El día de mañana será el turno de los adherentes a Petro, que se movilizarán en torno al lema "Gran diálogo social" y en apoyo a las reforma. Se espera que los puntos más fuertes estén en Bogotá, Santa Marta, Neiva, Manizales y Villavicencio.
El miércoles 15, será nuevamente el turno de los sectores opositores que advierten con lanzar un paro nacional indefinido, en este caso impulsado por los sectores más radicales de la derecha. El motivo es también el rechazo a las reformas del Gobierno.
Buscando sumar adherentes, los organizadores buscan sumar a los trabajadores de aplicaciones y a los taxistas, entre otros. Esta convocatoria está catalogada como de "alto riesgo" para el orden público, subraya la prensa colombiana.
El contexto de la ola de marchas no es el mejor para Petro. En una reciente medición de la encuestadora Datexco para W Radio, el primer gran sondeo de 2023 en el país, el 55% de los encuestados respondió que Colombia "va por un mal camino".
La cifra difiere de modo significativo del 66% de encuestados que en diciembre respondieron a la empresa demoscópica Invamer que creían que las cosas en el país "están mejorando". El temor es que esa merma marque una tendencia hacia el pesimismo.
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