Ómicron provoca récords de casos en el mundo y la OMS proyecta un gran número de hospitalizaciones
En Estados Unidos, por ejemplo, las cifras relacionadas con la Covid-19 se incrementaron de manera abrupta en los últimos siete días, ya que fueron registrados 237.061 contagios, un 66% más de infecciones que la semana precedente. La cantidad de fallecidos llegó a 1.453, un 18% más, siempre de acuerdo a los datos brindados por la Universidad Johns Hopkins.
Gentileza Gran parte del mundo está alerta y toma medidas ante la expansión de la variante Ómicron del coronavirus.
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El número de casos de Covid-19 a nivel mundial alcanzó uno de los peores picos de la pandemia, impulsados por récords de contagios en varios países de Europa, situación que provocó que potencias como China e India redoblen las restricciones y que la Organización Mundial de la Salud (OMS) advierta que la variante Ómicron provocará "un gran número de hospitalizaciones".
En Estados Unidos, por ejemplo, las cifras relacionadas al coronavirus se incrementaron abruptamente en la última semana, cuando se registraron 237.061 casos, es decir un 66% más que la semana previa, y 1.453 muertes, un 18% más, según datos de la Universidad Johns Hopkins.
El gobierno de Joe Biden, sin embargo, anunció este martes que "las restricciones de viaje ya no son necesarias para proteger la salud pública", ya que "las vacunas de refuerzo protegen contra Ómicron". Atento a ello, decretó la reapertura de las fronteras con Sudáfrica, Botsuana, Zimbabue, Namibia, Lesoto, Eswatini, Mozambique y Malawi.
En América del Sur, la situación es alarmante en Bolivia, donde autoridades sanitarias informaron que el 100% de las unidades en terapia intensiva para Covid-19 de los hospitales públicos de la región de Cochabamba están ocupadas con pacientes que no se vacunaron.
Los contagios han aumentado también en Europa. Francia, Grecia, Portugal y el Reino Unido registraron nuevos récords diarios con más de 180.000, 21.000, 17.000 y 129.000, respectivamente. Los 179.807 positivos detectados en Francia marcan un nuevo récord diario europeo y solamente India y Estados Unidos reportaron hasta ahora más de 200.000 en veinticuatro horas. Además, la variante Ómicron es ahora oficialmente la dominante también en Suiza y Países Bajos.
Preocupación generalizada
En China, fueron registrados 175 casos en la ciudad norteña de Xi'an, la cifra diaria más alta para una ciudad del país desde marzo de 2020 y pese a tener en estricto confinamiento a sus 13 millones de habitantes. Por eso mismo, también se aisló a cientos de miles de residentes de la ciudad de Ya'an, donde fue ordenado el cierre de comercios.
Incluyendo los casos de Xi'an, China registró en la última jornada 209 casos de coronavirus, la cifra de contagios más alta desde marzo de 2020, cuando los reportes de la Comisión Nacional de Salud de Beijing comenzaron a dar los casos asintomáticos por separado.
También estableció nuevas medidas la capital de la India, Nueva Delhi, incluido un toque de queda nocturno, entre las 22 y las 5, y el cierre de las escuelas, centros de salud y piscinas, tras detectar que en los últimos días hubo un aumento de los contagios vinculados a la nueva variante Ómicron.
Asimismo, aplicó el 50% del aforo a los bares y restaurantes y restringió el horario de apertura de los comercios. Con ello, el gobierno indio intenta evitar una situación similar a la sufrida en mayo último con el catastrófico brote de la variante Delta, cuando se registró más de 400.000 casos y 4.000 muertes diarias.
En Europa la rápida propagación de la variante Ómicron provocará "un gran número de hospitalizaciones" de enfermos de Covid-19, aunque sea una variante ligeramente menos peligrosa que sus predecesoras, como Delta, advirtió la rama regional de la OMS.
"Un rápido aumento de Ómicron, como el que observamos en varios países -aunque se combine con una enfermedad ligeramente menos grave- provocará un gran número de hospitalizaciones, sobre todo entre los no vacunados", declaró Catherine Smallwood, una de las principales responsables de OMS Europa. Ante la incertidumbre sobre la nueva variante, los países dudan entre fuertes restricciones y una estrategia más flexible, debido a los signos de menor gravedad de Ómicron.