El Papa ha subrayado durante el rezo mariano de este domingo que "el odio, la rivalidad y la división matan la caridad fraternal", la cual es, según ha señalado, "la base de las relaciones interpersonales".
El Papa ha subrayado durante el rezo mariano de este domingo que "el odio, la rivalidad y la división matan la caridad fraternal", la cual es, según ha señalado, "la base de las relaciones interpersonales".
"Si aceptamos la Ley de Dios en nuestros corazones, entendemos que cuando no amamos a nuestro prójimo, hasta cierto punto, nos matamos a nosotros mismos y a los demás, porque el odio, la rivalidad y la división matan la caridad fraternal que es la base de las relaciones interpersonales", ha destacado el Santo Padre.
El Papa ha dedicado el Ángelus al "Sermón de la Montaña" y ha indicado que hay que entender los mandamientos de la Ley de Dios como "un instrumento de libertad" que ayuda a las personas a no ser "esclavos de las pasiones y el pecado".
Así, el Pontífice ha afirmado que Jesús quiere ayudar a sus discípulos a tener un "acercamiento justo" con las prescripciones de los Mandamientos dados a Moisés, "exhortándolos a estar disponibles para Dios que nos educa a la verdadera libertad y responsabilidad a través de la Ley".
De este modo, ha instado a los católicos a "abandonar un estilo de vida de promesas rotas, no mantenidas" y a asumir "la actitud de plena sinceridad con todos".
Así, ha incidido en que Jesús es consciente de que "no es fácil vivir los Mandamientos de una manera total y tan profundamente", y que por eso ofrece "la ayuda de su amor". "Vino al mundo no sólo para cumplir la Ley, sino también para darnos su amor", ha concluido el Santo Padre.
Con información de dpa