La guerra se recrudece en Ucrania y el país sabe que necesita contar con soldados y el mejor armamento posible para resistir. Pero también es importante la salud de las tropas.
En Kharkiv los soldados reciben una rápida formación de parte de Jeff, un instructor voluntario, para salir al frente y atender a sus compañeros heridos.
La guerra se recrudece en Ucrania y el país sabe que necesita contar con soldados y el mejor armamento posible para resistir. Pero también es importante la salud de las tropas.
Es por esto que en la región de Kharkiv, movilizados y voluntarios ucranianos toman intensas clases de medicina para convertirse en médicos y enfermeros del frente. En una sala con apariencia escolar, los soldados escuchan atentamente las instrucciones que les da Jeff, un médico voluntario que intenta que sus "alumnos" partan con la mayor cantidad de contenido posible.
"En una de las clases tuvimos algunos soldados que ya tienen un conocimiento previo de la medicina, pero sino todo lo aprenden aquí", explicó Jeff. "Jamán tenemos suficiente tiempo para prepararlos, pero dentro de estas tres semanas intentamos enseñar lo mayor posible. Normalmente trabajamos con el Protocolo March, el cual se logró después de muchas guerras y conflicto, porque aumenta la supervivencia de los soldados en el campo de batalla", comentó.
La evaluación March proporciona una sistemática de evaluación y tratamiento del paciente con el objetivo de retrasar la muerte de la víctima el tiempo suficiente para ser tratado en un centro hospitalario.
"Mi familia está preocupada, pero al mismo tiempo feliz por la decisión que tomé porque entienden que hay que defender la libertad de Ucrania y la de todo el mundo. Hace un año Rusia invadía este país y hay que defenderlo", agregó Jeff, quien dejó a su familia y profesión en Estados Unidos y su unió a esta tarea.