Jueves 1.10.2020
/Última actualización 13:16
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, anunció este jueves que la UE decidió iniciar acciones legales contra el gobierno del Reino Unido, por su intento de modificar con un proyecto de ley aspectos centrales del acuerdo del brexit. Lo hizo durante una breve comparecencia en la que no admitió preguntas.
"Esta mañana, la Comisión decidió enviar una notificación formal al gobierno británico. Este es el primer paso en un procedimiento de infracción", dijo Von der Leyen, quien agregó que ahora Londres tiene un plazo de un mes para "enviar sus observaciones".
La primera reacción, sin embargo, no se ha hecho esperar tanto. "Hemos presentado con claridad las razones que tornan necesarias las medidas relativas" a Irlanda del Norte, dijo un portavoz del gobierno, argumentando que se debe "proteger la integralidad del mercado interno británico" y que el ejecutivo responderá "llegado el momento" a la acción legal iniciada por Bruselas.
ArchivoUn polémico proyecto de ley
El corazón del conflicto es el proyecto de ley impulsado por el gobierno británico y que modifica cláusulas esenciales del acuerdo firmado el año pasado. En concreto, modifica la aplicación de tarifas y controles aduaneros en Irlanda del Norte, previstos en el Acuerdo de Retirada. Para Von der Leyen "esa ley, por su propia naturaleza, es una ruptura de las obligaciones de buena fe estipuladas en el acuerdo. Si es adoptada tal como está, estará en total contradicción con el protocolo para Irlanda e Irlanda del Norte".
La UE ya había establecido un plazo hasta el fin de septiembre para que el gobierno británico elimine de esa ley las "cláusulas problemáticas", pero el martes la Cámara de los Comunes del Parlamento aprobó el texto y lo envió a la Cámara de los Lores. "El plazo venció ayer (miércoles). Los puntos problemáticos no fueron eliminados", lamentó Von der Leyen.
El acuerdo incluye un dispositivo por el cual esa provincia británica mantendrá las reglas del mercado común europeo para evitar reimponer una frontera con la vecina República de Irlanda y preservar la frágil paz que reina en la isla desde el Acuerdo del Viernes Santo, de 1998.
Desde el martes, negociadores de la UE y del Reino Unido están reunidos en Bruselas para tratar de definir como será la relación posbrexit entre Londres y el bloque europeo. Diplomáticos señalaron que esas conversaciones no se verán necesariamente afectadas por las acciones legales contra Londres. "La Comisión seguirá trabajando duro en una implementación completa y a tiempo del acuerdo de retirada; mantenemos nuestros compromisos", subrayó Von der Leyen.