El gobernador chavista del estado Miranda, Héctor Rodríguez, afirmó que "está la mesa puesta" para el diálogo que el oficialismo y la oposición de Venezuela tienen previsto iniciar a mediados de este mes en México, aunque advirtió que habrá que llevar "con pinzas" el proceso, debido a las "contradicciones" entre diversos sectores opositores.
"Está la mesa puesta para sentarnos en México, ojalá eso se consolide y vayan todas las oposiciones", dijo Rodríguez, uno de los representantes designados por el oficialismo para las conversaciones. "En estos bloques hay muchas contradicciones, el diálogo lo tenemos que llevar con pinzas; los chavistas cometimos un error al agrupar a toda la oposición y tratarlos a todos por igual", señaló después.
Rodríguez, además, explicó que "no todo opositor está de acuerdo con un golpe de Estado, con las guarimbas (protestas violentas) o con el bloqueo", como el oficialismo llama a la situación derivada de las sanciones económicas impuestas por varios países. El funcionario ratificó que la meta del oficialismo para el diálogo es acordar el levantamiento de las sanciones y sostuvo que las negociaciones no deberían estar condicionadas al proceso de las elecciones regionales de noviembre próximo, cuestionado por algunos sectores opositores.
"Si ponemos la mesa de México condicionada a lo que pasa en las elecciones de gobernadores, la estamos destinando al fracaso", dijo Rodríguez. "Hay un consenso generalizado en cuanto a las elecciones de alcaldes, la mayoría de los actores políticos quieren participar, ojalá la Unión Europea (UE) nos acompañe, pero no podemos depender de que un país venga o no para validar la elección, las elecciones tenemos que validarlas los venezolanos", agregó.
Principal reclamo: elecciones libres
El25 de julio pasado, el presidente Nicolás Maduro había anunciado que en agosto podría instalarse en México la mesa de diálogo con la oposición, con el apoyo del gobierno de Noruega y con el posible acompañamiento de varios países, incluido Estados Unidos. Asimismo, Maduro dijo que el oficialismo impuso tres condiciones para dialogar: el pleno reconocimiento a su gobierno, el levantamiento de todas las sanciones impuestas por Estados Unidos y la UE, y la liberación de todos los recursos venezolanos bloqueados fuera del país.
En tanto, voceros opositores reclamaron el establecimiento de un cronograma de elecciones libres y transparentes, con observación internacional, que incluya presidenciales y legislativas, así como una atención decidida de la crisis humanitaria que el país sufre desde hace varios años.
El comienzo de las conversaciones está previsto en principio para el 13 de este mes y aún no estaba decidido si tendrán lugar en la Ciudad de México, en Cancún o en Cuernavaca. Por el oficialismo participarán el mencionado Héctor Rodríguez y el presidente de la Asamblea Nacional (parlamento), Jorge Rodríguez.
Por la oposición, estaban confirmados Gerardo Blyde, Carlos Vecchio y Tomás Guanipa, todos ellos pertenecientes al G4, el grupo de los cuatro partidos opositores más numerosos. Asimismo, se confirmó la participación del ex director del Consejo Nacional Electoral, Luis Rondón. Los dos sectores tenían previsto designar mujeres, aunque por ahora no habían sido elegidas o sus nombres no habían trascendido.