El inicio de las vacaciones de invierno trajo algunos inconvenientes en los aeropuertos de Ezeiza y Aeroparque. Un problema en el radar de Ezeiza, que controla los movimientos aéreos de Buenos Aires, provocó demoras y retrasos. El inicio de las vacaciones de invierno trajo algunos inconvenientes en los aeropuertos de Ezeiza y Aeroparque. Un problema en el radar de Ezeiza, que controla los movimientos aéreos de Buenos Aires, provocó demoras y retrasos.
Los inconvenientes arrancaron pasadas las 9 de la mañana de este domingo. Hubo demoras en el aterrizaje de los vuelos que operan en el aeropuerto internacional Ministro Pistarini y en el aeroparque metropolitano Jorge Newbery.
El inconveniente detectado en el radar retrasó casi todas las llegadas y se debieron establecer distancias de unos 15 o 20 minutos entre un avión y otro, informaron fuentes aeroportuarias.
Mirá tambiénIntensifican los controles en las rutas durante las vacaciones de inviernoLas pantallas permiten ver la ubicación exacta y la proximidad de los aviones al aeropuerto, y al no poder contar con esa información, los controladores están dando la orden para que los aviones permanezcan en el aire a la espera de la habilitación para aterrizar.
Esto no sólo hizo que las llegadas se vean retrasadas sino también que los vuelos partan también con demoras.
Los inconvenientes arrancaron pasadas las 9 de la mañana de este domingo. Hubo demoras en el aterrizaje de los vuelos que operan en el aeropuerto internacional Ministro Pistarini y en el aeroparque metropolitano Jorge Newbery.
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Las pantallas permiten ver la ubicación exacta y la proximidad de los aviones al aeropuerto, y al no poder contar con esa información, los controladores están dando la orden para que los aviones permanezcan en el aire a la espera de la habilitación para aterrizar.
Esto no sólo hizo que las llegadas se vean retrasadas sino también que los vuelos partan también con demoras.