La inflación de diciembre fue de 0,8 por ciento y en consecuencia la suba de precios acumulada en 2010 fue de 10,9 por ciento, según informó hoy el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC). Los precios mayoristas subieron el mes pasado 0,9 por ciento y a lo largo del año avanzaron 14,6 por ciento. En tanto, los precios de la construcción subieron 2,7 por ciento en diciembre y durante todo el período anterior el aumento llegó a 19 por ciento.
El resultado oficial muestra una inflación que resulta menos de la mitad que el calculado por consultoras y economistas privados, que la sitúa entre el 25 y 27 por ciento. Para el INDEC, en 2010 los alimentos subieron en promedio 14,7 por ciento, cifra que marca una aceleración respecto a 2009 cuando el mismo organismo había informado un aumento en el rubro de 5,9 por ciento.
En diciembre respecto a noviembre, los alimentos aumentaron 0,6 por ciento, impulsados por alzas de 2 por ciento en bebidas e infusiones, 1,2 por ciento en frutas 0,9 por ciento en lácteos y 0,8 por ciento en carnes. El segundo rubro de mayor alza durante el año pasado fue indumentaria con un incremento de 14,6 por ciento. En diciembre respecto del mes anterior el aumento de precios fue de 1,9 por ciento. Un aumento similar se produjo en esparcimiento (14,6 por ciento), luego que en diciembre subiera 2,7 por ciento. Equipamiento y mantenimiento del hogar tuvo un aumento de 10,6 por ciento, tras alza de 0,7 por ciento en el último mes del año pasado.
Al igual que sucedió con alimentos, el sector de esparcimiento tuvo una aceleración en la suba de precios ya que en 2009 había sido de 5,88 por ciento. En educación hubo una variación de 12 por ciento durante 2010, mientras que en el mes pasado la suba fue de 0,5 por ciento.
Transporte y comunicaciones exhibió una suba de 6,04 por ciento en el año y de 0,6 por ciento en el mes de diciembre. Para el INDEC los precios de los alquileres subieron apenas 6 por ciento el año anterior.
La inflación oficial con la que se había realizado el presupuesto nacional era de 6,7 por ciento, con lo cual todas las variables quedaron desfasadas. Un claro ejemplo es la recaudación impositiva, ya que la AFIP destacó que había conseguido ingresos en 2010 un 15 por ciento superiores a los fijados por el presupuesto, pero sin realizar el ajuste ante el nuevo escenario económico. En consecuencia, el Gobierno contó con recursos adicionales que fueron manejados a través de decretos presidenciales.
20 por ciento anual para los sectores de menos recursos
La inflación para los sectores de menores recursos alcanzó a 20 por ciento durante 2010, según el INDEC. Este fue el incremento que durante el año pasado mostró de la Canasta Básica Alimentaria (CBA), con la cual se mide la indigencia. A partir de este aumento la CBA para un matrimonio y dos hijos llegó a un valor de 578,58 pesos, con un alza en diciembre de 0,42 por ciento frente a noviembre.
Los grupos familiares tipo que no logran ese nivel de ingresos son considerados indigentes. Las cifras contradicen al ministro de Economía, Amado Boudou, que había dicho que en la Argentina la inflación afectaba a los sectores de mayores recursos. En tanto, la Canasta Básica Total (CBT) -con la que se mide la línea de pobreza- subió durante 2010 16,2 por ciento, luego que en diciembre se incrementara 0,67 por ciento. En consecuencia una familia tipo tuvo que reunir 1.252,54 pesos en diciembre para no caer en la pobreza. La diferencia entre ambas canastas radica en que en su composición la CBA sólo tiene alimentos y la CBT agrega servicios básicos.
El aumento del 20 por ciento obedece a suba en los principales alimentos. Por ejemplo el INDEC reconoció que la carne aumentó 32,6 por ciento en 2010 y señaló que las frutas subieron 18 por ciento, el azúcar 19 por ciento, las verduras 15,7 por ciento y los productos lácteos y huevos 13,2 por ciento. La lista de alimentos descripta es el destino mayoritario de los ingresos de los menores recursos.
Sin embargo, el ministro de Economía, Amado Boudou, había dicho que la inflación "no era un tema" de la población en general y que sólo afectaba a los sectores de ingresos medios y altos. El INDEC contradice la posición del funcionario, porque la variaciones del índice de precios al consumidor (IPC), que también computa aumentos en otros rubros como indumentaria, salud y esparcimiento, tuvo una variación de 10,8 por ciento.
Las críticas a la metodología de cálculo del INDEC apuntan a señalar que una subestimación en la variación de precios reduce el valor de las canastas (CBA y CBT) y en consecuencia la resultantes es una cantidad de pobres menor a la que realmente tiene la Argentina.
DYN