Uno de los líderes del Partido Obrero (PO), Marcelo Ramal, celebró el arresto del líder de la Unión Ferroviaria, José Pedraza, pero advirtió que por el crimen del militante Mariano Ferreyra “faltan detenciones”, y aseguró que también hay “responsabilidades empresariales, policiales y del propio Estado”.
Según Ramal, el crimen de Ferreyra, ocurrido el 20 de octubre pasado, “tenía que tener un organizador, un responsable directo. Estos jefes, como muchas veces dijimos, tenían nombre y apellido, y eran José Pedraza y Juan Carlos Fernández”, el segundo del sindicato.
El dirigente advirtió que “en el crimen de Mariano Ferreyra se demostró, por un lado, la connivencia de la Policía Federal, que liberó la zona para que pudiera actuar esta patota criminal, y luego la complicidad del concesionario ferroviario, la Unidad de Gestión Operativa Ferroviaria de Emergencia (UGOFE) de otorgarles permisos, licencias gremiales, a muchos de los integrantes de esta patota el día que mataron a Mariano”.
“Esto fue preparado, planificado con la connivencia de la empresa”, prosiguió, y reclamó a la jueza interviniente, Susana López, “que se llegue a las responsabilidades empresariales, policiales y del propio Estado”.
Consultado en el canal Todo Noticias sobre si “faltan detenciones”, contestó: “Sí, desde luego. Se tiene que avanzar”.
“Este derrumbe del sistema ferroviario mucho tiene que ver un concesionario privatizado que ha hecho negocios contra los usuarios, una dirección sindical que, en vez de defender a los trabajadores, ha lucrado con ellos, y un Estado que ha financiado con subsidios todos estos negociados indignos”, opinó.
Según Ramal, “la detención de Pedraza debe servir también para expulsar del ferrocarril y terminar con este triángulo mafioso, y devolverle el sistema ferroviario a los trabajadores, a sus usurarios, a sus técnicos, para que sea reconstruido sobre bases completamente diferentes”.
Fuente: DyN