RAÚL ESCOBAR
"Me comunico con este espacio, para expresar mi sugerencia acerca de que se debe buscar una alternativa de traza y sistema (a gravedad o por bombeo) para resolver el problema de cañería de cloacas frente a Unión y sobre bulevar Gálvez".
AMÉRICO
"A Assa: esta empresa dejó muchos corralitos y pozos abandonados. Algunos de ellos, a saber: Agustín Delgado 1400, Laprida y J.M. Zuviría; Pedro Víttori y Castellanos, sobre la ciclovía. Los pozos son monstruosos y se han profundizado con las últimas precipitaciones. ¿Para cuándo los respectivos arreglos señores?".
JOSÉ LUIS
"He visto que en algunos lugares están tapando los 'cráteres' en las calles. Felizmente, para regocijo de los automovilistas. La espera fue mucha, demasiada, pero celebramos que algo se esté haciendo. Sin dudas queda mucho por delante, como por ejemplo el acceso al Centro Comercial frente al barrio El Pozo. Hay hundimientos, verdaderas depresiones del suelo, que rompen cualquier amortiguador de vehículo. No obstante, uno no deja de tener esperanza. Estábamos anhelando respuestas de varias gestiones municipales. Así que le damos un voto de confianza al Dr. Poletti: que siga adelante con la cantidad de obras que necesita Santa Fe, largamente postergadas. Ojalá el doctor Poletti y su equipo de trabajo lleven a rescatar Santa Fe y hacerla una ciudad hermosa, digna de ser habitada y visitada".
SILVANA BELTRAME
Agradezco este espacio brindado por el diario, para poder realizar un descargo público, ya que la Municipalidad de la ciudad me toma por tonta, ingresando mis reclamos pero luego no los solucionan.
Hace unos días, pasaron 2 barrenderos por calle Rivadavia al 7700 y desde la ventana les reclamé que limpiaran calle Pavón, esquina donde vivo. Ellos solo barren desde calle Rivadavia al 7700 hacia el sur, dejando la mayoría de las veces agua acumulada (foco de mosquitos) y la basura en la esquina. Y calle Pavón nunca es barrida, salvo por los vecinos. Mi reclamo es: si yo pago la TGI todos los meses, para que estos señores limpien las calles, ¿por qué no lo hacen? Para peor, son unos ordinarios maleducados, que te gritan barbaridades, groserías, desde el medio de la calle.
Cuando pasan, el barrido y limpieza que hacen deja mucho que desear y el alumbrado por calle Pavón al 2300, a mitad de cuadra, lámpara colgante no existe.
Si esto sigue así, solicito que se saquen los ítems de barrido, limpieza y alumbrado de la boleta del impuesto municipal, porque no existe ni una cosa ni la otra: ni barrido, ni limpieza, ni iluminación, y menos Municipalidad, porque el intendente no sale del centro y parece no tener idea de las acuciantes y básicas necesidades del resto de los barrios.
Estoy cansada de tantas situaciones, como la mencionada. Parecemos tontos, pagando por un servicio que no recibimos.
Quiero decirle al señor intendente que vuelva a caminar por Guadalupe Oeste, como lo hizo en la campaña: verá el estado en que están las calles, la falta de iluminación, los basurales...
Hay mucho por hacer en los barrios, Dr. Poletti. Yo lo voté con la convicción de que usted sabía que Santa Fe necesitaba mucho. Espero que no me defraude.
GLADIS BRISTIEL
Vivo en la avenida Arístóbulo del Valle al norte, y tenemos el problema de que es una zona muy oscura. No se sabe si los plafones ya son viejos, están desgastados, o qué, pero lo cierto es que la iluminación es casi inexistente. No sé a quién le corresponde de la Municipalidad a venir a supervisar y controlar esto que menciono. Los vecinos opinamos que a los árboles, ya sea de las veredas como los del cantero central, habría que bajarlos un poco de altura (no sacarlos, porque son necesarios para el medio ambiente).
Como decía, los plafones no iluminan como debería ser y las copas de los árboles están tan altas que tapan de una acera a la otra la escasa iluminación que hay. Otro tema es la velocidad a que circulan los vehículos en esta avenida: hemos hecho notas pidiendo la presencia de inspectores y éstos ni siquiera han aparecido. Es una pista de carreras: las motos no respetan los semáforos en rojo, la gente no puede cruzar prácticamente. También faltan controles policiales, ya que están robando todas las noches aquí en el barrio, ayudados por la poca iluminación.
Pregunto: ¿a quién debo dirigirme, a quién le corresponde controlar todo esto?
Las luces están prendidas desde hace 5 o 6 meses aproximadamente, las 24 horas del día, aunque de noche casi no iluminan, por supuesto.
En resumen, lo principal es controlar la altura de los árboles, la velocidad de los vehículos, aunque tenemos muchas otras necesidades más en el barrio.
Por favor: que alguien venga a inspeccionar. Con el intendente anterior tuvimos cero respuesta. Tenemos esperanzas de soluciones con la nueva gestión.
MIGUEL ÁNGEL REGUERA
El café siempre es una excusa para encontrarse en un día de otoño, húmedo y pringoso, a hablar de tiempos idos, de utopías perdidas y de sueños interrumpidos. Esto lo sabía más que nadie Juan Nepomuceno Baigorria "el último unitario", que apoyado en el estaño del "Bar Ourense", nos estaba relatando las vivencias de los años 60, que él supo definir como "el paraíso de la clase media".
En la mesa más cercana, los tres amigos escuchábamos y mirábamos el taco del zapato derecho de Baigorria, que trabado sobre la barra inferior del mostrador imponía indiscutible autoridad a su palabra. Allí le escuché decir:
-Nooo, muchachos, si quieren aprender historia argentina, lean la gran obra de Joaquín -Quino- Lavado, llamada Mafalda.
- ¿Qué? ¿Es una novela?, preguntó Santoro.
-Nooo! Es una historieta de Quino sobre una niña sagaz que plantea interrogantes sobre las guerras en el mundo, el colonialismo cultural, el feminismo, la amistad… sobre la vida misma.
Además, siguió ilustrando Juan, muestra a la clase media de entonces, con sus hijos yendo impecables con el guardapolvo blanco y el portafolio de cuero a la escuela, donde siempre había clases. La vuelta a casa, la leche con galletitas y el ir a jugar seguros en la vereda (tal vez una rayuela o a la escondida) o a los cowboys en la plaza del barrio. Ojo, que algunos ayudaban a papá, como Manolito; o hacían los mandados como el soñador Miguelito, no sin protestar y preguntando: ¿siempre yo tengo que ir?
Luego estaba el papá de Mafalda, oficinista en una empresa de seguros, pero que podía comprarse su autito en cuotas (un 2CV, aunque podía haber sido un "bolita" o un "4 latas"). En su departamento propio (no alquilado) lo esperaba una esposa preocupada por los quehaceres diarios, a la que Mafalda cuestionaba por renunciar a sus estudios universitarios o a ser profesora de piano. Junto a la mesa familiar, había una TV en blanco y negro que podía mostrar desde una telenovela hasta la llegada del hombre a la Luna, mientras la familia empezaba a programar sus vacaciones veraniegas en una playa de la costa argentina.
-Es increíble, casa propia, con auto, con trabajo, seguridad, educación, vacaciones…, siga Baigorria, que parece un sueño, comentó "el colorado" Moltoni.
-Es así pibe! Y estaba Libertad, una amiguita de Mafalda con ideas socialistas, que empatizaba mucho con Mafalda que también era progresista. Aunque Libertad, con su pequeña estatura hablaba de Cambio Social drástico, pero a un tiempo jugaba armoniosamente con sus amigos, con el mismo respeto y cariño que la conservadora Susanita, o con Manolito, capitalista y materialista a más no poder. Todos en una convivencia sin altisonancias, ni precipicios ideológicos insuperables.
-Lamento interrumpir, dije yo, que algo ya conocía de la historieta que comentaba, pues mis padres tenían la colección "Todo Mafalda". Pero tengo una clase. ¿Por qué no la seguimos la semana que viene y nos cuenta más de ese paraíso perdido?
Y él agregó: -Y les contaré también de "Burocracia", la tortuga de Mafalda y Guille, siempre lenta, siempre pesada y eterna. Ya que en el Paraíso hay de todo como en Botica.
Nos levantamos a pedir la cuenta, cuando se escuchó la voz de Baigorria dando un ultimátum: -"Gallego", lo de esta mesa anotámelo a mí! Moltoni se puso el saco, me guiñó un ojo, se acercó a Santoro y le susurró "Qué grande este Baigorria", ¿cómo sabía que no tenía "un cobre"?
Dejanos tu comentario
Los comentarios realizados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Evitar comentarios ofensivos o que no respondan al tema abordado en la información.