La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) excluyó hoy, entre otras firmas, a la empresa Bunge Argentina del Registro Fiscal de Operadores de Granos en su rol de acopiador, debido a que esta firma le adeuda al organismo recaudador aproximadamente 1.800 millones de pesos.
La deuda se conformó debido a la realización de maniobras de triangulación nociva de exportaciones a través paraísos Fiscales y por operaciones con facturas apócrifas, informó la AFIP esta tarde.
Del total de la deuda reclamada por la Administración, unos 550 millones corresponden a intereses por la incorrecta liquidación de los derechos de exportación por la ley Martínez Raymonda en el período 2007, precisó la información oficial.
La medida adoptada por el organismo que encabeza Ricardo Echegaray fue publicada hoy en el Boletín Oficial como Resolución 3397.
Previamente, el pasado 1 de octubre, la AFIP había suspendido a la empresa del Registro, un paso previo a la exclusión oficializada hoy con su publicación en el Boletín Oficial.
Para volver al registro, Bunge deberá pagar la totalidad de su deuda y demostrar que realiza sus operaciones en forma transparente.
A partir de las investigaciones de la AFIP, la Justicia de Córdoba trabó un embargo preventivo a 50 propiedades que tiene la firma en Córdoba.
La exclusión no implica que la empresa no pueda operar sino que tendrá mayores costos financieros: se le pasa a retener la totalidad del IVA, del 10,5% y el 15% en el Impuesto a las Ganancias.
‘Lo único que se ha modificado es el proceso de control que se lleva a cabo: antes presentaban la documentación y se les acreditaba el pago tuvieran o no tuvieran deuda, mientras que ahora, si las empresas tienen deuda con la AFIP, se deberán someter a un proceso de fiscalización automático, lo cual no significa que no se les va a pagar‘, dijo una fuente del organismo fiscal.
En este sentido, se precisó que ‘se les va a pagar siempre y cuando del proceso de fiscalización surja efectivamente que tienen un comportamiento fiscal adecuado y compatible‘.
Y, agregó la fuente, ‘no queremos que nos pase lo mismo que nos pasó con Bunge que utilizó facturas apócrifas, por eso si no tienen deudas van por el procedimiento sistémico que igualmente también tiene procesos de fiscalización‘.
Télam