El ex titular de la Unidad Especial de Investigación del atentado a la AMIA, Mario Cimadevilla, acusó hoy al gobierno de Mauricio Macri, y especialmente al ex ministro de Justicia Germán Garavano, de "presionar y hostigar" a jueces y otros funcionarios para "salvar" a imputados por irregularidades en la investigación de ese ataque y hasta de impedir su esclarecimiento.
El ex legislador añadió que desde el gobierno de Macri "querían mantener sospechas sobre posibles autores para, a través de esas suspicacias instaladas y nunca esclarecidas, operar en otras causas contra sus adversarios políticos".
En ese sentido, Cimadevilla, ex senador nacional radical y ex miembro del Consejo de la Magistratura, denunció que los blancos de esas acciones eran los abogados de la Unidad AMIA y que se habría buscado favorecer al fallecido ex jefe policial Jorge Palacios y los ex fiscales Eamon Mullen y José Barbaccia.
"Los abogados de la Unidad, que actuaban como querellantes en la causa denominada AMIA 2 (o de encubrimiento), fueron permanentemente hostigados por el ministro de Justicia (Garavano) a través de distintos funcionarios de esa cartera", dijo Cimadevilla en declaraciones a Télam.
Recordó que "en esa causa estaba bajo investigación la actuación del ex juez (Juan José) Galeano, los fiscales Mullen y Barbaccia y el ex presidente (Carlos) Menem, entre muchos otros", al referirse a varios de los acusados de irregularidades en la investigación del atentado a la AMIA; perpetrado en 1994 y que provocó 85 muertos y tres centenas de heridos.
El ex juez Galeano -a través de quien se pagaron 400 mil dólares provenientes de la ex SIDE al ex reducidor de autor Carlos Telleldín para involucrar a policías bonaerenses en el caso- fue destituido por juicio político y otros ex investigadores y ex funcionarios fueron llevados a juicio por encubrimiento y el supuesto "desvío" de la "pista siria" durante el gobierno de Menem.
Asimismo, el juicio a la llamada "conexión local" del atentado (realizado entre 2001 y 2004) terminó con la absolución de todos los acusados a raíz de las serias anomalías registradas en la tramitación del expediente.
El ex senador de la UCR por Chubut aseguró que "la ’preocupación’ que transmitía el ministro Garavano no era investigar la verdad, sino hacer saber que el deseo del presidente Mauricio Macri era pedir la absolución de alguno de los imputados, concretamente Palacios, Mullen y Barbaccia".
El ex titular de la Unidad AMIA aseguró que cuando estuvo al frente de ese organismo pudo "comprobar, en persona, que el gobierno de Macri a través del ministro de Justicia Garavano, pretendió que los jueces no actuaran de acuerdo a la ley sino a los deseos de ese gobierno, y eso es lisa y llanamente una presión".
"Pasado el tiempo advierto que nunca tuvieron intención de trabajar para el esclarecimiento del atentado; es más, a esta altura de los acontecimientos creo que querían la absolución de algunos amigos", aseguró Cimadevilla, quien reside en Trelew.
"Pero no solo eso, querían mantener sospechas sobre posibles autores para, a través de esas suspicacias instaladas y nunca esclarecidas, operar en otras causas contra sus adversarios políticos" detalló.
Aseguró además que como él se negó a la pretensión de que asumiera la responsabilidad de pedir la absolución para algunos de los imputados, Garavano "designó nuevos letrados que pidieron la absolución de aquellos a quienes desde un principio se pretendía salvar y luego el Jefe de Gabinete de Ministros disolvió la unidad".
En tal sentido, interpretó que su "posición y la de los letrados que integraban la Unidad no era tan errada ya que aquellos a quienes se pretendía ’salvar’ fueron condenados".
Afirmó que "el gobierno de Macri nunca tuvo intención de avanzar en el esclarecimiento del atentado porque el trámite de la causa AMIA en la que se investiga el atentado está desde hace casi quince años parado, debido a que los imputados iraníes no comparecen ante el juez argentino y el proceso no puede avanzar si el imputado no comparece ante el juez".
Recordó que "tampoco se permitió desde el Ejecutivo la incorporación de tecnología como inteligencia artificial para avanzar en la investigación, como lo hacen los países del mundo desarrollado frente a este tipo de atentados, por lo que todo me habilita a suponer que nunca existió ningún interés en avanzar en la investigación del atentado".