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Miguel Lifschitz admitió que las negociaciones con el gobierno central para intentar acordar el modo y monto de pago “están agotadas”. Aún así, dijo que se mantendrá el diálogo, pero que deberá ser el máximo tribunal quien indique el procedimiento a seguir.
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El gobierno provincial decidió retomar la vía judicial para exigir a la Nación el pago de la deuda de coparticipación federal. En noviembre de 2015, el máximo tribunal de justicia había fallado a favor de Santa Fe, a raíz de un planteo que había iniciado el por entonces gobernador Hermes Binner con el respaldo de ex mandatarios, incluso, del Partido Justicialista. Desde entonces -cambio de gobiernos mediante-, se inició una negociación entre las gestiones de Miguel Lifschitz y Mauricio Macri para intentar acordar el monto y modo de pago. Se avanzó no sin dificultades y dilaciones; se llegó a una propuesta que parecía casi cerrada. Pero los últimos vaivenes de la economía, hicieron que la oferta del gobierno central prácticamente se tornara inviable para Santa Fe. La posibilidad de cobrar buena parte de la acreencia con bonos ya no resultaba un buen negocio para la provincia. Por eso, Lifschitz anunció en primer lugar, que la negociación se freezaba, hasta tanto se disiparan el horizonte. Pero ello no sucedió; por eso, este fin de semana, el propio mandatario confirmó que se retomará la vía judicial.
Agotadas
En diálogo con la prensa, después de presidir una serie de actos en localidades del departamento San Cristóbal, Lifschitz admitió que la instancia de discusión con la Casa Rosada está prácticamente terminada. “De alguna manera hemos agotado las negociaciones con el gobierno. La propuesta que habíamos armado, acercando posiciones, quedó desactualizada por la devaluación; la incertidumbre económica”, sostuvo. “Ese camino ya quedó agotado”, reiteró. Y ratificó que “más allá de mantener un diálogo (con el gobierno central), vamos a requerir una respuesta de la Corte Suprema de Justicia”.
Trasfondo
A valores históricos, la deuda con Santa Fe era de 22 mil millones de pesos. Según las estimaciones realizadas por la provincia, hoy ronda los 54 mil millones. Pero la Nación sólo ofrecía reconocer 31.900 millones que se pagarían de manera total mediante la emisión de títulos a doce años, con tres de gracia. Para compensar la diferencia, el gobierno central ofrecía financiar una serie de obras en jurisdicción de la provincia, que debían ejecutarse entre los años 2019 y 2021. Se había avanzado hasta en el listado de esos proyectos a incluir, aunque la posibilidad de cancelar parte de la deuda con obras nunca cuajó en el propio socialismo. Uno de los principales detractores de la idea fue el presidente de la Cámara de Diputados, Antonio Bonfatti. Ése fue un escollo no menor en términos políticos, aunque el más relevante que hizo finalmente caer toda la negociación fue de origen económico, dado que la crisis cambiaria ya no hizo atractiva la oferta de pago para Santa Fe. Frente a ello, se espera ahora que sea otra vez la Corte quien defina cómo debe resolverse la operación.
Cronograma electoral
El gobernador aclaró que no tiene definido aún el cronograma electoral para el próximo año. Si bien la semana pasada circuló en el ámbito legislativo un borrador con fechas tentativas, que indicaban primarias para el 14 de abril y generales para el 16 de junio, Lifschitz dijo que la decisión aún no está tomada.
“Tenemos plazo hasta fin de año (para decidirlo). Lo venimos conversando dentro del Frente Progresista y también lo conversaremos con otras fuerzas; vamos a buscar un acuerdo”, advirtió. El mandatario recordó que “por Constitución, hay un margen entre junio y setiembre para las elecciones generales, así que dentro de ese margen vamos a decidir lo que consideremos como el mejor calendario”, planteó.