Combinando advertencias y negociaciones, los operadores de Casa Rosada fueron diseñando el resultado a favor obtenido en el primer tramo del tratamiento legislativo de la Ley de Bases y Principio para la Libertad de los Argentinos en la Cámara baja. En el arranque de la semana, fue el vocero presidencial, Manuel Adorni, el que le afirmó a El Litoral que debido a la quita del capítulo fiscal del megaproyecto habría un ajuste mayor a las provincias, a la vez que abrió el juego aperturista hacia la oposición acuerdista asegurando que quedaban afuera las facultades delegadas en materia fiscal y previsional. El viejo axioma de presionar para invitar a convenir, en este caso, la aprobación en general del paquete de medidas del Poder Ejecutivo, dio sus frutos.
“El Gobierno no siente ninguna frustración por haber desactivado algunos puntos del paquete enviado al Parlamento, por el simple hecho de que nuestro objetivo, que es alcanzar el déficit cero, sigue en pie”, manifestaron desde la mesa chica de Javier Milei, quien esta semana hizo equilibrio entre cuestiones de reorganización de su administración y la puja en Diputados.
La Cámara de Diputados y tres jornadas de intenso debate. Crédito: Reuters.
En el flanco interno, la salida de Guillermo Ferraro de Infraestructura indicó el andarivel por el que marcha la gobernanza en el gabinete de La Libertad Avanza. Con muchos temas por resolver en cuanto a nombramientos y designaciones, las definiciones que surjan del Congreso, -en esta primera prueba de fuego política que transcurre el oficialismo- determinará la siguiente fase ordenadora de una gestión que todavía se está acomodando. “Nadie tiene asegurado el puesto acá”, repite uno de los principales asesores del jefe de Estado.
La frase hizo mella en las entrañas de la compleja área de comunicación libertaria, por la que ya pasaron Eduardo Roust, Belén Stettler y se sostiene en la cornisa Eduardo Serenellini, aunque según fuentes gubernamentales, por poco tiempo. Su enfrentamiento con el asesor Santiago Caputo y la vocería, sumado al perfil de ministro plenipotenciario que quiso imponer en el Gabinete, hicieron que la secretaria General de la Presidencia, Karina Milei, lo dejara al borde del precipicio.
La resolución que deja a los medios públicos bajo la órbita de la jefatura de Gabinete, a cargo de Nicolás Posse, y otras definiciones que vacían de poder al todavía Secretario de Medios, posicionan a Adorni como máximo responsable en ese sector y remodelan la estructura de poder que rodea al presidente y a su mesa chica.
Los alfiles naturales en el proceso de diálogo con gobernadores y legisladores -que tienen por objetivo llevar a buen puerto las iniciativas de Casa de Gobierno en el Parlamento- son el ministro del Interior Guillermo Francos y el consultor Caputo, con recepción directa en el diputado José Luis Espert y el titular de la Cámara baja, Martín Menem. Ese núcleo es el que modeló la aprobación en general de la Ley Ómnibus, que el próximo martes surcará el camino de la media sanción en particular. Un round que se desarrollará cuando el primer mandatario esté en Israel llevando adelante una cargada agenda de cinco días con otros tres más en Roma y el Estado Vaticano.
En las usinas del gobierno de los libertarios infieren que las visitas al primer ministro Benjamín Netanyahu, su par italiana Giorgia Meloni y el Papa Francisco no podían darse en un mejor momento. “Sostener la imagen positiva de Javier en el exterior es fundamental para nosotros, porque tiene repercusión interna y todos sabemos que los argentinos somos los números uno en interesarse por cómo nos ven afuera. Recuerden la importancia que le dio a eso el ex presidente (Carlos) Menem y lo bien que le fue en ese aspecto”, argumentó uno de los hombres que participa de la organización del periplo.
Milei y su paso por Davos, en lo que fue su primer viaje oficial fuera del país. Crédito: Reuters.
Aunque oficialmente se diga sobre el levantamiento del cepo este año, que el Gobierno no hace futurología y no se atiene a los pronósticos y recomendaciones del FMI, fue el propio portavoz presidencial quien aseguró que ese sigue siendo el norte de la administración central. Pese a que el organismo multilateral de crédito estime una caída en la Economía del 2,8 por ciento, en Casa Rosada se muestran optimistas y adelantaron que prevén una inflación del 20 por ciento promedio en el pasado mes de enero. Un número elevado, pero de cinco puntos menos comparado al 25,5% del último diciembre.
En otro orden de cosas, después de la última reunión del Gabinete nacional, Manuel Adorni resaltó la figura de Sandra Pettovello, debido a la determinación que mostró en referencia a los reclamos por falta de alimentos en comedores que las organizaciones sociales ligadas a UxP hicieron en supermercados, la sede de la Copal y la cartera de Capital Humano. Sentada en la puerta del ministerio, la funcionaria evitó hablar con los referentes e invitó a que quienes estuvieran atravesando situaciones de hambre dejaran sus datos para recibir la asistencia directa del Estado, si la situación así lo amerita. Nadie aceptó el convite.
La estrategia gubernamental pasa por separar la necesidad real de la actividad política opositora, replican en la sede del Ejecutivo. Lo mismo se ejecuta desde el Ministerio de Seguridad conducido por Patricia Bullrich. En los tres días de sesiones parlamentarias, en las que se movilizó la izquierda bajo una receptividad de baja intensidad del kirchnerismo y ausencia de los gremios de mayor peso -que continúan sus reclamos por vía judicial- el saldo que hace Casa de Gobierno es positivo.
Si bien hubo heridos, detenidos y destrucción de una parte del capital urbano, la lectura que hicieron los altos funcionarios del gobierno es que todo se dio en el marco de lo que se esperaba, y que la percepción del ciudadano común es que al comparar las movilizaciones pasadas con las que se dan desde la llegada de LLA, el orden y la posibilidad de poder circular mejor por la vía pública se impone por sobre la imagen de encapuchados rompiendo la vereda para arrojar piedras.
El jueves por la tarde, el bloque de senadores de La Libertad Avanza se adelantó a lo que se votó el viernes y estuvo reunido con Milei y su vicepresidente, Victoria Villarruel, en Balcarce 50. Allí analizaron el escenario que esperan para cuando reciban en la Cámara alta el proyecto que se emita desde Diputados. El jefe del bloque oficialista, Ezequiel Atauche, manifestó que trabajan “para darle las herramientas que el Gobierno requiere y hacer las transformaciones que la Argentina necesita”. Una foto de los tres parados en el histórico Salón Blanco de Casa Rosada fue el colofón de lo que se viene.
Por ocho días, Villarruel estará a cargo del Poder Ejecutivo Nacional y diseñando las maniobras legislativas que permitan a su fuerza obtener el triunfo que marcará el tiempo de lo que queda de este 2024 que recién empieza. El presidente Milei confía en la compañera de fórmula que eligió para disputar la conducción del país al peronismo, y sabe que el futuro de ambos está atado a lo que ocurra en las próximas semanas.
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