El nuevo proyecto de ley del legislador -que se suma a los proyectos de su autoría ya aprobados por la Cámara Baja para la educación virtual- consiste en utilizar el canal público de la provincia como así también emisoras del interior para transmitir en horarios centrales de la mañana y de la tarde contenido televisivo educativo basado en la currícula de los diversos niveles y modalidades, centrándose en los contenidos y habilidades que el Ministerio de Educación considere prioritarios. Su fin es el de reforzar, asistir y ser un instrumento pedagógico más para el sistema educativo provincial, en los períodos en los que la presenciabilidad escolar se vea suspendida. En el mismo sentido pide la elaboración de contenidos adaptados para ser transmitidos por emisoras de radio con alcance en el territorio provincial. Además, solicita que se invite a otros canales de televisión de alcance provincial a participar de este sistema, otorgándoles tanto a radios como a canales de televisión que se adhieran, y durante el tiempo que se lleven a cabo, exenciones en impuestos provinciales y rebajas en las tarifas de energía eléctrica como incentivo para su participación.
Consultado acerca de esta iniciativa, Oscar Martínez expresó que “Seguimos proponiendo ideas para poder sortear la dramática situación que estamos viviendo en materia educativa. Hace más de un año, en abril de 2020, presentamos un proyecto para dotar con dispositivos móviles con conectividad a alumnos y alumnas de todos los niveles de la educación obligatoria, sean de instituciones de gestión oficial o privada, que necesitasen este insumo para mantener su vínculo pedagógico con la institución. En junio, además, presentamos un proyecto para otorgar créditos en 36 cuotas a tasa 0% para el acceso de los y las docentes a la tecnología. Ambos proyectos ya tienen la media sanción de la Cámara Baja, ahora falta la decisión política de ponerlos en marcha, pero dadas las circunstancias y la situación por la que atraviesa la educación seguimos proponiendo iniciativas para evitar o por lo menos morigerar las consecuencias de la pandemia en materia educativa.”
“Existe un Informe del Observatorio de la Educación de la Universidad de San Andrés del mes pasado en el que se reflejan números estremecedores sobre la educación en la pandemia. Este informe revela por ejemplo que el 20 por ciento de los alumnos y alumnas más vulnerables van a perder el 50 por ciento de los conocimientos adquiridos durante la pandemia, mientras que aquellos que tienen conectividad van a perder solo el 25 por ciento, esto quiere decir que las desigualdades en materia educativa de este año y medio van a repercutir de manera catastrófica en el futuro de esos niños, niñas y adolescentes. Las desigualdades de hoy serán aún peores en su futuro”, agregó.
Y finalizó manifestando que “a nadie escapa la polémica que se ha suscitado en el ámbito político en estos días en torno a esta situación. Sin embargo, nada nos interesa menos que entrar en divisiones estériles. Por el contrario, siempre hemos sostenido como ideario de nuestra agenda una política propositiva que busque dar respuesta a los desafíos que esta inusitada realidad nos pone por delante. La realidad de las y los alumnos en situaciones de vulnerabilidad no puede esperar más, ya lo he manifestado y lo seguiré haciendo mientras haga falta”.