La provincia de Santa Fe resolvió no adherir, al menos por ahora, a las restricciones anunciadas en la noche de este miércoles por el Presidente de la Nación. Si bien Alberto Fernández enunció exclusivamente limitaciones para AMBA y provincia de Buenos Aires, invitó al resto de los gobernadores a adherir. Pero Omar Perotti, al igual que prácticamente el resto de sus pares, optó por mantener en territorio santafesino las medidas que habían sido anunciadas el viernes pasado. Esto es, cierre de locales gastronómicos desde las 23, restricción de circulación de cero a seis, suspensión de reuniones familiares en domicilios particulares, más cierre de casinos y salones de fiestas. Aun así, la situación será evaluada de manera permanente y en función de la evolución de los diferentes indicadores sanitarios, podrían revisarse las decisiones.
Más allá de ratificar las restricciones ya vigentes, la provincia también anticipó que recogerá las sugerencias presidenciales y reforzará los operativos de control. En tal sentido, se anticipó que aumentarán las supervisiones en los límites interprovinciales; y se incrementará la realización de los testeos cotidianos para la detección de nuevos casos de Covid. Los Ministerios de Trabajo y Producción, por su parte, actualizarán y optimizarán los protocolos con el fin de prevenir nuevos contagios y mantener el actual ritmo del sistema productivo provincial. Se insiste en los cuidados personales para la prevención, como el uso correcto del barbijo, el distanciamiento social y el lavado frecuente de manos.
Todo ello será en paralelo al análisis de variables sanitarias como número de contagios, índice de positividad, disponibilidad de camas e índice de mortalidad. Se trabajará, además, de manera coordinada con el sector privado y con todos los actores civiles de la sociedad.
Asimismo, se prevén para las próximas horas una serie de consultas con especialistas; para las 13 de este jueves, de hecho, había sido convocado el Comité de Expertos. Sobre la base de lo que allí se converse, eventualmente, se podrían definir futuras medidas. Pero todo será consensuado con las autoridades comunales y municipales.
En tanto, el ministro de Trabajo, Juan Manuel Pusineri, informó que se convocó para este viernes a las 9 a una reunión entre los Ministerios de la Producción, Salud, Trabajo y Gobierno con sectores empresarios y empleadores y trabajadores de toda la provincia. El criterio es el de ajustar protocolos, llevar adelante un monitoreo constante y una fuerte apelación a la responsabilidad individual y social, para evitar nuevas retricciones.
Es pertinente plantear que más allá de que el Poder Ejecutivo haya ratificado las medidas vigentes, varios municipios del interior ya han comenzado esta semana a instrumentar restricciones más severas ante el aumento de casos y la saturación de los sistemas locales de salud.
Es el caso de San Guillermo (departamento San Cristóbal) donde la circulación se restringe ya a partir de las siete de la tarde y hasta las seis de la mañana. También en Sunchales (departamento Castellanos), se resolvió cierre de la gastronomía a partir de las 21. Y este jueves, el intendente de Rafaela, Luis Castellano, decidió – entre otras medidas- suspender las actividades recreativas tanto en el sector público como privado.
El gobernador Omar Perotti alertó este jueves, en diálogo con Radio Dos de Rosario, acerca de "representantes de muchos laboratorios que están apareciendo" para ofrecer vacunas. Lo dijo a propósito de la situación generada con el intendente de Sunchales, Gonzalo Toselli, quien reveló haber hecho gestiones para comprar dosis desde el municipio que conduce. "No estamos comprando chicles, son vacunas. Debemos tener garantizada la calidad de la vacuna, del laboratorio y de la logística de traslado. A esos recaudos a tomar los planteamos con la Región Centro", comentó.
"Las medidas responden a la complejidad del cuadro sanitario: si el cuadro sanitario lo logramos mantener, podemos mantener el mismo nivel de actividades" Juan Manuel Pusineri, ministro de Trabajo.