Telam
El proyecto de ley que reforma el sistema de Inteligencia argentino recibió hoy media sanción en el Senado con 38 votos afirmativos y siete negativos, en una sesión especial que no contó con la mayoría opositora, y en la que se rindió homenaje al fiscal fallecido Alberto Nisman a la vez que el oficialismo rechazó las denuncias contra la presidenta Cristina Fernández de Kirchner por encubrir el caso AMIA.
La iniciativa será tratada mañana en un plenario de comisiones de la Cámara de Diputados y sería convertida en ley en la sesión del próximo miércoles 25 de febrero, informaron fuentes oficiales.
El oficialismo logró el quórum para sesionar con 38 legisladores presentes, entre los propios y el apoyo de Roxana Latorre (Alianza Santa Fe Federal), Jorge Garramuño (Movimiento Popular Fueguino), Lucila Crexel (Movimiento Popular Neuquino), José Roldán (Alianza Frente para Todos Corrientes) y María Higonet (PJ-La Pampa).
Como miembro informante, el primero en exponer fue el senador del Frente para la Victoria por Neuquén y presidente de la comisión de Asuntos Constitucionales, Marcelo Fuentes, quien aseguró que la iniciativa promovida por el Gobierno ‘está íntimamente vinculada a la defensa nacional y la seguridad interior y a la defensa de la Nación y de los ciudadanos‘.
‘Nadie puede desconocer la existencia de cuestiones centrales producidas en los últimos años que ameritan que el Estado nacional cuente con la capacidad de producir inteligencia de manera autónoma en el marco de la Constitución‘, explicó Fuentes. Enumeró los cambios introducidos al dictamen original, anunciados ayer por el secretario de Inteligencia, Oscar Parrilli, como la prohibición de que los agentes funcionen como auxiliares de la justicia y el control y transparencia de los fondos reservados‘.
‘La cabeza del sistema nacional de inteligencia será la AFI, que dirigirá los subsistemas tanto de la Inteligencia Criminal, que sigue en el ámbito del Ministerio de Seguridad, como de lo estratégico militar‘, añadió. Fuentes explicó que ‘se refuerzan prohibiciones internas y se limitan las intervenciones en investigaciones criminales, todo se somete al control democrático‘ y recalcó que los nuevos cambios se han hecho porque la Presidente ‘ha tomado el compromiso‘ y elevó un montón de reformas apuntando a profundizar control y transparencia de democratización de los servicios.
Su par Pedro Guastavino, presidente de la comisión de Justicia y Asuntos Penales, se refirió al traspaso de las escuchas telefónicas que efectuaba la ex SIDE al Ministerio Público Fiscal, destacó los nuevos tipos penales y el aumento de penas a actos delictivos cometidos por los agentes de inteligencia.Guastavino destacó que la transferencia de las escuchas se harán a ‘un órgano independiente con autonomía funcional y financiera‘.
Por la oposición, Liliana Negre de Alonso, del Interbloque Federal, recordó que la oposición ha presentado ‘innumerables proyectos de ley que nunca fueron incorporados‘, criticó el memorandum firmado con Irán en el marco del caso AMIA y cuestionó la ‘urgencia‘ del Gobierno por aprobar la ley de inteligencia.
Graciela Di Perna (Frente de la Integración de Chubut) cuestionó también la normativa y advirtió que ‘modficar esta ley requiere del consenso de todas las fuerzas políticas‘.
Guillermo Pereyra, Movimiento Popular Neuquino, consideró que ‘primero habría que investigar las denuncias de Nisman y definir su sospechosa muerte‘ y justificó así su voto en contra a la medida.
El presidente del Interbloque Federal, Adolfo Rodríguez Saá, cuyos ocho miembros fueron los únicos opositores presentes en el debate, expresó su oposición a la reforma por considerar que ‘no cambia nada‘ y criticó que se trata de ‘un trámite express‘.
Miguel Pichetto, el jefe de los senadores kirchneristas y encargado de cerrar el debate, consideró que la nueva ley ‘es superadora‘ de la ya vigente y que ‘mantiene la esencia de la estructura anterior y amplía la democratización de derechos y garantías que la otra ley no contemplaba‘.
El senador por Río Negro destacó la presencia de la ex esposa de Nisman hoy en el Senado, la jueza Sandra Arroyo Salgado, quien asistió a la audiencia pública convocada por la oposición, y dijo que coincidía con ella en el sentido de que ‘no hay que seguir politizando el hecho‘. ‘No le agregamos nada cuando hacemos valoraciones de naturaleza política o definiciones que la Justicia todavía no nos ha dado‘, sostuvo Pichetto y pidió ‘prudencia para no seguir generando escenarios de conmoción social que no son buenos para los argentinos‘ ya que ‘todos queremos paz y también justicia y verdad‘.
Mencionó además la prohibición para los ‘espías‘ de realizar tareas represivas o funciones policiales o de investigaciones salvo ante requerimiento específico y fundado por un juez y especificó que la nueva Agencia Federal de Inteligencia deberá quedar constituida en 120 días, una vez aprobada la ley.
También detalló la baja del plazo de 15 a 25 años del plazo de desclasificación de documentación reservada, el hecho de que toda persona podrá peticionar desclasificar información y la transparencia en la asignación de los fondos a los organismos de inteligencia.