Roberto Sukerman se muestra agradecido por el hecho de que su nombre "suene" para ser candidato a intendente en Rosario, "porque habla de que uno es referente en ese lugar. He podido hacer una excelente elección en 2019 y estuve a un punto y medio de ganar la ciudad".
El diálogo telefónico con El Litoral es desde su despacho en la Jefatura de Gabinete del Ministerio de Trabajo de la Nación, en la que fue designado hace pocos días. Precisamente la charla se inicia y continúa sobre la materia que lo ocupa en este momento de gestión: el empleo. Eso y los cambios que introdujeron la tecnología, primero, y la pandemia después. Pero eso será materia de otra nota.
Llevado al campo de lo político partidario, aclara que "lo que me preocupa es que haya alguien que crea que estoy trabajando en ser candidato a intendente a Rosario. No estoy trabajando en eso. Estoy trabajando en lo que estoy haciendo hoy, como trabajé como ministro de Trabajo de la provincia de Santa Fe en 2020 y como ministro de Gobierno en 2021. Si estoy pensando en la candidatura del año que viene no voy a hacer bien mi trabajo, porque tengo que pensar en el país, no en la ciudad que amo".
Puesto a considerar sus expectativas en materia electoral para el 2023, asegura que "me preocupa mucho más cómo va a ser el armado, cómo nos vamos a poner de acuerdo los referentes del peronismo de Rosario y de otros sectores afines al peronismo para generar un gran frente y una opción superadora a lo que viene desde hace muchos años en la ciudad. Porque el gobierno de Javkin es una continuidad del Frente Progresista".
En ese "tiempo compartido" que involucra a la ciudad que sigue recorriendo, y sobre la que opina, y su rol a nivel nacional, remarca que "mi preocupación como rosarino y más allá de mi función pública tiene que ver con este armado, no con mi candidatura. Yo puedo decidir el último día del cierre de listas si quiero ser candidato a intendente".
Precisamente, esa preocupación es la que lo lleva a sostener que "uno reconoce que Omar Perotti ha sido un gran elector en los últimos comicios, y por eso ganó en 2019 apoyado por los distintos sectores del peronismo. Pero si uno deja de lado a Perotti, que no es de Rosario, así como a otros dirigentes, hay que entender también que la ciudad tiene referentes con una gran capacidad electoral: desde María Eugenia Bielsa, Agustín Rossi, la vicegobernadora (Alejandra Rodenas), Marcelo Lewandowski, mi caso, diputados nacionales y provinciales, concejales. Tiene un cúmulo de dirigentes o funcionarios del gobierno provincial o del gobierno nacional que no está en ningún otro lugar de la provincia. Y que nos hace pensar que tenemos que conformar un gran frente y una gran unidad para ganar la ciudad.
- ¿Considera posible que se logre esa unidad para competir fuerte en Rosario? ¿Se ve en otro lugar que no sea el de candidato a intendente?
- Primero, tenemos la obligación de ponernos de acuerdo en esto que estamos llevando adelante. No es que todos los dirigentes que nombro tienen que estar en una interna a intendente, lo que digo es que tenemos que sincronizar en una estrategia que nos permita ganar la ciudad de Rosario. Tenemos un potencial aquí que, más allá de las candidaturas de cada uno en 2023, nos tendría que permitir ganar. Porque además, en 2023 se cumplen 50 años de la última elección que ganó el peronismo en Rosario, que fue en el '73.
Lo que pasó en 2019 es que fui candidato único, no tuve internas. Por eso valoro las internas, y por eso he sido crítico de quienes han sido críticos de las internas. Por mi parte, (en 2019) fui personalmente a buscar a distintas personas para que sean mis rivales en una interna y no lo conseguí. Fui a buscar a uno, a otro, y a otro para generar más volumen, más debate y no lo conseguí. Fui solo, y por 7000 votos no ganamos la ciudad de Rosario. Ahí está la justificación de por qué estoy más preocupado en generar las condiciones de unidad y movilización del peronismo de Rosario que en ser candidato.
No quiero ser candidato a intendente de Rosario: quiero ser intendente de Rosario. Lo que quiero es ganar, y si no soy yo el que tiene que ganar, porque el pueblo así lo decide, que sea el que gane dentro de esta estrategia que estoy planteando.
- ¿Estarán dadas las condiciones en 2023 para que el escenario de construcción de esta fuerza sea distinto de 2019?
- Creo que si. Por todo el escenario político, me parece que ya a nadie le puede caber ninguna duda de que el peronismo tiene un potencial político, porque lo pudo demostrar en 2019. No solo a nivel local, sino que Lewandosky hizo una buena elección a senador, Perotti a gobernador. En 2021, casi el único departamento que ganó el peronismo es Rosario. Están dadas las condiciones para que tengamos autoestima, amor propio, nos pongamos de acuerdo para generar estas condiciones de competitividad para ganar la elección en 2023.