Un episodio confuso, por momentos tenso, se vivió en el Senado con el tratamiento de un proyecto de ley que tenía el visto bueno de todos los bloques para la transformación de la comuna de Teodelina en ciudad. El cambio de estatus propuesto por el senador Lisandro Enrico (UCR-General López) ya había recibido dos veces una preferencia y estaba en apariencia todo listo para que este jueves 18 de noviembre se concretara la media sanción. Sin embargo, al momento de su tratamiento y durante la lectura del texto a considerar los senadores de las bancadas justicialistas del Nes y de Lealtad descubrieron que, además, en el expediente se había agregado otro artículo que también haría de la comuna de Elortondo una nueva ciudad.
Sin ánimo de obstruir pero con las lógicas prevenciones del caso, primero José Baucero (San Javier) del bloque Juan Domingo Perón y luego Alcides Calvo (Castellanos) de Lealtad dijeron que en ese pedido de tratamiento sobre tablas y con la Cámara en Comisión, era la primera oportunidad en la que se discutía ese cambio tan trascendente para los elortondenses. Dijeron que tal como se había hablado en labor parlamentaria tenían toda su predisposición para la jurisdicción teodelinense y aconsejaron que la cuestión siga en comisiones.
Enrico entendió que no podía forzar un debate en minoría y explicó las razones de la inusual escena en la que quedó en un incómodo centro de atención. Visiblemente molesto, expuso que había un acuerdo con jefes de bloques de Diputados que luego se rompió (en la cámara baja). Y que la idea era que el Senado aprobara con media sanción la transformación de Teodelina en ciudad, mientras que Diputados haría lo mismo pero con Elortondo. Y entonces reveló que existe entre ambas poblaciones una suerte de rivalidad por ver cuál de las dos llega primero a ser considerada ciudad, por lo que debía buscarse desde la Legislatura un conveniente empate.
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Aunque Enrico no lo dijo, es evidente que como la situación política en Diputados parece tener otro clima y que por ahora no hay garantías para que haya una media sanción para Elortondo, el legislador optó por agregar a esa comuna a su proyecto de ley, a último momento el mismo día de la sesión.
Más aún dijo, palabras más palabras menos, que "como senador no puedo pedir la aprobación para solo una de estas dos comunas que deben ser ciudades, son localidades idénticas, con iguales desarrollos y por eso habíamos acordado que con proyectos cruzados entre ambas cámaras aprobáramos sendos proyectos".
Baucero se preguntó si se podía en una misma norma convertir a dos comunas en ciudades, porque le parecía que sería conveniente que cada una tenga su número de ley. Es decir, una norma para Teodelina y otra para Elortondo. El tema no quedó del todo claro y se tomó la sabia decisión de dar marcha atrás y volver a comisiones.
Para algunos de los demás legisladores, de los asesores del cuerpo y de los cronistas parlamentarios de la capital provincial fue toda una novedad saber de la interna entre ambas poblaciones del departamento General López en el extremo sur de la bota. Enrico habló con preocupación de esas tensiones y de la necesidad de que "no se cometa una injusticia" porque las dos merecen ser ciudades.
El pueblo de Teodelina que pronto seguramente será ciudad se llama así en honor a Doña Teodelina Fernández de Alvear, esposa del fundador Don Diego de Alvear, que en 1869 concretó la creación de la nueva colonia en una zona donde ya en 1850 se había instalado el Fortín "El Chañar". La fundación "oficial" es de 1875.
En tanto, Elortondo que tiene idénticas aspiraciones y parece que no ha tenido la misma suerte en Diputados, lleva el apellido de Don Federico Elortondo, esposo de Doña Isabel Francisca Armstrong, heredera de los terrenos que su marido donara para que por ellos pasara el ferrocarril de la Compañía del Gran Sud de Santa Fe y Córdoba, en la línea Villa Constitución – La Carlota. El 26 de noviembre de 1888 se solicita al gobierno provincial que se apruebe el diseño de un pueblo que había resuelto fundar la compañía, comprendiendo también una estación ferroviaria. El 19 de marzo de 1889 se accede al pedido (fecha de fundación de la localidad) imponiéndose el nombre de Elortondo, dado que Don Federico se había ocupado de lo referente a la donación.