Por Gustavo Capeletti
Una masiva movilización surcó las calles para conmemorar el Día de la Mujer. Luego, la columna se concentró en la plaza central. Documento crítico.
Por Gustavo Capeletti
La actividad central por el Día de la Mujer tuvo en Reconquista como epicentro uno de los costados de la plaza central de la ciudad, enclave al que arribó la columna de unas 300 manifestantes luego de haber partido desde el Monumento de la Mujer, emplazado en la esquina de Bulevar Lovatto y Belgrano, cerca de un kilómetro al sur.
Con pasacalles y carteles identificatorios de cada colectivo presente y exhibiendo letreros con consignas demandantes de mayores derechos y de igualdad de género, las integrantes de la Mesa de Mujeres del Norte Santafesino hicieron primero una escala en la intersección de calles Hábbeger y General Obligado, centro comercial y neurálgico de la urbe, para luego arribar al predio público, donde se dio lectura a un extenso y critico documento alumbrado en conjunto por todas las representaciones presentes.
En ese escrito leído a viva voz frente a la medialuna de humanidades que formaron las marchantes en Patricio Diez y General Obligado, centro histórico de Reconquista, pudo escucharse que “la deuda es con nosotras” y una clara posición en rechazo al acuerdo con el FMI.
Mujeres, lesbianas, travestis, trans y no binaries se manifestaron en contra de la pobreza que “crece e impacta mayoritariamente sobre nosotras. Encabezamos solas, miles de hogares con trabajos mal remunerados, en condiciones de precariedad. y además hacer frente a inflación para sostener la economía familiar”, de acuerdo a un resumen publicado horas antes en las redes.
Estas condiciones perpetúan las violencias, siendo la dependencia económica una de las principales causas que “nos impide separarnos de los agresores”, denunciaron, al tiempo que alertaron que “los femicidios, trans/travesticidios no cesan, la violencia sexual muestra su cara más cruel. Por eso exigimos la aprobación de la declaración de la Emergencia Nacional en Violencia de Género”.
Luego, dejaron en claro que este 8M la demandas son: igual salario por igual trabajo, trabajo digno; cupo laboral y ley integral travesti - trans sin discrecionalidad; reconocimiento económico para el trabajo comunitario, reconocimiento para los trabajos de reproducción social ( domésticos y de cuidado), búsqueda y acompañamiento de familiares de desaparecidos y desaparecidas en democracia y políticas efectivas e integrales para abordar la violencia machista.
Por último y tras apuntar contra los sistemas judicial, político, eclesiástico y parte de la sociedad que no acciona ante los femicidios, pronunciaron el nombre de víctimas del norte santafesino: Mariela Benítez, enero del 2020 en Alejandra; Marisa Altamirano, febrero del 2020 en Las Toscas; Carolina Ruiz, julio del 2020 en Reconquista; Rocío Vera, julio del 2020 en Reconquista; Yamila Valenzuela, noviembre del 2020 en Reconquista; Ana María Acevedo, Rosalía Jara, Vanesa Zabala.
“Vivas, libres y desendeudadas nos queremos”, concluyeron.