Luego de la adjudicación de las obras, en agosto del año pasado, comenzaron las obras de corrimiento de la defensa de la ruta 90, a la altura de Melincué.
Finalmente, luego de la llegada de las máquinas a la localidad en el mes de enero, comenzaron las obras que terminarán con el corrimiento definitivo del terraplén de defensa apostado sobre la arteria provincial, con un diseño que, además de realzar el lugar, evitó la expropiación de terrenos.
Luego de la adjudicación de las obras, en agosto del año pasado, comenzaron las obras de corrimiento de la defensa de la ruta 90, a la altura de Melincué.
Cabe recordar que el gobierno provincial, a través del Ministerio de Infraestructura, Servicios Públicos y Hábitat había informado en diciembre que la empresa Rio Salado S.R.L. llevará adelante los trabajos por un monto (inicial) de $536.972.497,47 y con un plazo de ejecución previsto en ocho meses. El objetivo es trasladar la ubicación del terraplén al sur de la ruta, hacia el área lagunar, ya que representaba un inconveniente vial para conductores, quedando habilitada una sola mano para circular.
En los últimos días los vecinos de Melincué dejaron ver su entusiasmo y alegría por la puesta en marcha del proyecto, que tiene un curioso diseño en forma de “zigzag”, lo que permitirá que ya no sea un paredón monótono lo que separe la laguna del pueblo, sino que tendrá una impronta más sofisticada que permitirá que este espacio pueda ser visitado por los vecinos de la región y además contribuye en la rapidez de la realización, ya que de esta manera se evitó expropiar terrenos privados que existen en el lugar y se buscó la manera de hacerlo en terrenos fiscales.
En diálogo con El Litoral, la delegada del citado Ministerio, Liliana Rostom, explicó que “el diseño del proyecto busca hacer la defensa por terrenos fiscales (del Estado) para no tener que demorar y entrar en el trámite legal de tener que expropiar, porque en ese trayecto hay terrenos privados; estéticamente y arquitectónicamente es muy bueno”, puntualizó.
Además, Rostom destacó que la defensa “va a quedar muy linda, porque después va a haber un lugar de paseo y esparcimiento, con plantas e iluminación, sumando estética al lugar”.
Posteriormente, la venadense Liliana Rostom informó sobre la licitación realizada durante la última semana de febrero en la ciudad de santa Fe, donde se abrieron los “sobres con ofertas para el mantenimiento de las dos viejas bombas de las Estaciones de Bombeo 1 y 2 y su puesta en servicio, que serán llevadas a nuevo con todo su funcionamiento”. El presupuesto para esta obra suma 144 millones de pesos y hubo un solo oferente.
“La idea de la gente de Recursos Hídricos que está trabajando en esto es, además de hacer todas las obras, tenerlas preparadas y operativas por si en algún momento tienen que funcionar”, detalló la delegada del Ministerio de Infraestructura, Servicios Públicos y Hábitat de Santa Fe.
Además, señaló que este es un procedimiento que “nunca estuvo ni cerca de darse en Melincué, porque además del corrimiento de la defensa de ruta 90, del nuevo puente, de la alcantarilla con exclusas y del alteo de caminos, se hace también la puesta en servicio de las dos bombas”.
Por último, Rostom subrayó que lo que se está haciendo en la cabecera del departamento General López “es un trabajo importantísimo Todas estas realizaciones se dan gracias a la decisión política del gobernador Omar Perotti”.
El secretario de Recursos Hídricos, Roberto Gioria, había explicado hace algún tiempo que la obra del corrimiento de la defensa sobre ruta 90 “tiene como propósito reemplazar las defensas precarias dispuestas sobre media calzada de esa ruta, dado que fueron realizadas durante la emergencia hídrica por el crecimiento de la laguna Melincué en 2017. Por lo que correremos la ubicación del terraplén al sur de la ruta, hacia el área lagunar”.
Con respecto a las tareas a desarrollar, Gioria detalló que se removerá la defensa precaria para restituir la normal circulación de la ruta; se implantará el nuevo terraplén que deberá poder cerrarse en un único anillo defensivo con los terraplenes noroeste y sureste, acorde a la planificación realizada por la Secretaría durante la última emergencia. La obra en cuestión es el tan reclamado corrimiento del terraplén de la ruta 90, que trae innumerables problemas de circulación a la altura de Melincué.