Otro de los problemas que se presenta para este año es la imposibilidad de sembrar trigo por anegamiento o falta de piso en unas 25 mil hectáreas. “En total, representa unos 15 millones de pesos en pérdidas sólo en cosecha y se triplica si se suman los servicios -flete, personal, trilla, combustible, gastos de planta, etc.- llegando a 45 millones. A eso, hay que sumarle las hectáreas de maíz y soja que no se pudieron cosechar en total unos 30 millones de pesos, es muy preocupante. Si a eso que se perdió le sumamos la baja que se registró en el movimiento de camiones, merma en las ventas de insumos, menor acopio en las plantas, el pueblo entero sólo por soja, dejó unos 90 millones de pesos en el camino”, precisó Bonetti.
En este sentido, Novareto agregó que a esa falta de recursos la sufre el productor, pero también la gente del pueblo -menos ventas en comercios, almacenes, estaciones de servicios, entidades bancarias, empresas de servicios- y la zona. “Hay 11 meses por delante que tiene por afrontar el productor hasta la próxima cosecha gruesa sin recursos. Siempre y cuando se pueda sembrar la próxima campaña gruesa, muchos vamos quedando en el camino”, indicó.
Para la actividad tambera, los números hablan por sí solos. En un tambo promedio de la zona la caída en la producción alcanza en el mejor de los casos el 40%, unos 120 mil litros menos por mes, que representan 360 mil pesos de perdida, sólo en ingresos por venta de leche. “A eso, hay que sumarle que se cobra a los 40 días con una inflación mensual del 3% y sin contar el resto de los problemas que la inundación genera en los animales -enfermedades, abortos- y los campos -pérdida de nutrientes y pasturas-. De esta forma, no hay tambos que aguanten y de a poco todos vamos a ir cambiando de actividad”, indicó Daniel Parola tambero de Santa Clara de Saguier.
"En febrero alquilamos unas 100 hectáreas en Colonia Cello y trasladamos el tambo a esa zona. Las 150 hectáreas propias donde se encontraba el tambo están muy complicadas con unos 40 centímetros de agua en la parte más alta y unos 80 cm. en el sector más bajo. Sacamos las 220 vacas que teníamos en producción por un camino de 3 kilómetros hasta donde se podían arrimar los camiones para cargar la hacienda. Volvimos a intentar cuando el agua se fue un poco, pero desde fines de febrero no podemos llegar al campo ni siquiera con el tractor”.
Daniel Parola, tambero de Santa Clara de Saguier
"Esto da mucha bronca e impotencia, en su momento había decidido ampliar y modernizar las maquinarias del campo, dejé un poco de lado la ganadería y aposté fuerte por la agricultura, pero hace tres años que no tenemos producción. En los últimos días tuve que desprenderme de parte del capital para pagar deudas. Hay que achicarse porque las tasas de interés que se cobran con los créditos y por descubierto en cuenta corriente nos está liquidando y nos lleva a la ruina”.
Miguel Bonetti, productor agrícola de Santa Clara de Saguier
"Tan sólo este año perdimos unas 90 hectáreas de sorgo y no pudimos cosechar 40 hectáreas de maíz y 80 de soja. Además tuvimos una fuerte caída en los trabajos de fumigación, cosecha y siembra, sin contar la baja en los ingreso de granos a planta -por la inundación en las cámara de descarga-. Esto repercute directamente en el pueblo, hay mucho menos recursos en la localidad y se está notando.Así un año más, Santa Clara de Saguier no aguanta”.
Daniel Novareto, productor y contratista agrícola
“Desde finales de 2012 tengo las 60 hectáreas que alquilo para el tambo bajo el agua. Hoy, tenemos unas 100 vacas en ordeñe con una caída en la producción del 45%. Lo único que recibimos del gobierno provincial fueron 50 bolsas de maíz, es lamentable”, Matías Bonetti, tambero de Santa Clara de Saguier.