Ignacio Pellizzón | [email protected]
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Desde que se puso en marcha la Emergencia en el Transporte en Rosario el servicio no volvió a ser igual. Los meses fueron pasando, los casos de contagios de Covid tuvieron sus altas y bajas, pero el sistema siempre estuvo en el ojo de la tormenta. Resulta que su rentabilidad está íntimamente ligada a los subsidios nacionales y provinciales, pero además a la cantidad de boletos cortados, algo que todavía sigue sin alcanzar los niveles prepandémicos.
Para tratar de encauzar la crítica situación en que quedaron las operadoras durante el 2020, el Estado local tomó la decisión de aplicar recorte de unidades y unificar líneas. De esta manera, se ahorraron recursos para tratar de paliar la debacle empresarial, aunque en detrimento de la calidad del servicio. No obstante, se avanza en una recuperación, aunque la incertidumbre sobre si todos los que se bajaron volverán a subirse al colectivo será ineludible.
Con un escenario económico adverso, pero en franca recuperación, de a poco las autoridades municipales van tratando de mejorar el Transporte en la ciudad, sobre todo con una demanda en alza desde que volvió la presencialidad a las instituciones educativas. Sin embargo, las críticas siguen resonando entre los usuarios.
Para darle un marco actual al funcionamiento del servicio, el Observatorio del Transporte elaboró un informe extraordinario, al que tuvo acceso Mirador Provincial, para exponer el nivel en que están trabajando las distintas empresas que operan en la ciudad: Rosario Bus, El Cacique y MOVI.
En concreto, el paper señala específicamente que, actualmente, en Rosario circulan un 22% menos de unidades que en 2019, es decir, durante el año y medio de pandemia quedaron fuera del sistema 151 coches que todavía no retomaron su servicio.
El análisis se desarrolló tomando como referencia el último diagrama de servicios de prepandemia, correspondiente a la temporada invernal (marzo-diciembre) del año 2019, comparado con los horarios oficiales exhibidos en el sitio Internet del Ente de la Movilidad de Rosario (EMR) el día 15 de septiembre corriente. Además, el mismo se realizó sobre los servicios prestados en días normales -lunes a viernes hábiles-, excluyendo medios festivos -sábados- y festivos -domigos y feriados-.
Cabe recordar que las líneas eliminadas fueron: 101 Roja y 144 Roja (Rosario Bus); 112 Roja (El Cacique), y las Ronda del Centro, Ronda CUR-Sur, Enlace Irigoyen, Enlace Sur y AeroMOVI (MOVI). A principio de este mes se puso en servicio la nueva línea “Ronda Universitaria” (MOVI), cuyos parámetros se incorporaron a la estadística de cantidad de coches en servicio y vueltas por jornada, pero no se contabilizó como nueva línea porque opera entre cabeceras servidas por otras líneas en común (Plaza Sarmiento y Centro Universitario Rosario) y su recorrido se superpone con otras líneas preexistentes que pueden combinarse mediante empleo del boleto horario.
“A la vista de lo analizado, y del ritmo que está tomando la recuperación de las actividades cotidianas, resulta imperioso restablecer el diagrama normal de servicios previo a la Pandemia, tanto más necesario dada la necesidad de evitar el apiñamiento de usuarios a bordo de las unidades para reducir al máximo la posibilidad de diseminación de nuevas cepas COVID de mayor virulencia. También esta medida es necesaria para estimular el retorno de usuarios al TUP como herramienta imprescindible para reducir o incluso retrotraer su migración a modos de movilidad individuales alternativos (en especial, motocicletas y automóviles) que fomentan el aumento del congestionamiento, siniestralidad y contaminación de calles y avenidas urbanas”, destacan en el informe.
La mayor parte del costo de reincorporar los servicios al nivel pre-Pandemia ya está incluido dentro del costo operativo del TUP porque se conservó en su integridad y sin reducción de salarios a la totalidad de la planta de personal de conducción, administrativo y talleres; solamente incidirá en más el 23,3%3 del costo operativo correspondiente a combustibles, lubricantes, neumáticos, mantenimiento y reparaciones, suma que puede ser cubierta por la venta adicional de boletos.
“También es imperiosa la necesidad del restablecimiento de las líneas suprimidas, mereciendo destacar el caso de la Ronda del Centro, línea de carácter perimetral al centro-macrocentro que actúa como corredor alternativo al atravesamiento que realizan las demás, reduciendo tiempos de viaje y la densidad de ocupación de unidades. Su reposición sería especialmente atractiva para estudiantes, docentes y no docentes entre las zonas Sud y Sudoeste de la ciudad y el Centro Universitario Rosario (“La Siberia”) pudiendo trasbordar sobre el Boulevard 27 de Febrero evitando pasar por la zona céntrica; también tiene especial atractivo al pasar junto al Parque Independencia, actual polo atractor de viajes por el centro de vacunación establecido en el predio Ferial (ex Sociedad Rural) además de amplios espacios para recreación y actividades deportivas”, concluyen a modo de reflexión desde el Observatorio.
A este escenario se llegó a fines del 2020 cuando la secretaria de Movilidad municipal, Eva Jokanovich, llevó al Concejo las alarmantes cifras que exponía cómo se desplomó el sistema de transporte de Rosario. Fue más que suficiente para que los ediles acompañaran el proyecto oficial para aprobar la emergencia en el sistema.
La ordenanza que se aprobó y se puso en marcha el 25 de enero de este año establece la emergencia por un plazo de 24 meses. El Ejecutivo quedó facultado a “adoptar las medidas extraordinarias y urgentes que resulten conducentes a superar la situación de emergencia y garantizar la efectiva y regular prestación del servicio”. También, se determinó que el plazo de la emergencia quedaba concluido si los pasajeros totales mensuales del sistema alcanzaban el 90% de los pasajeros totales trasladados en el mes de octubre del 2019.
Con una caída en los casos y una segunda ola de covid que pareciera alejarse mientras la población sigue inoculándose, la vida en la ciudad de a poco va encontrando una nueva “normalidad” con mayor presencia de estudiantes en los ámbitos educativos y un incremento en la actividad diaria. “Bienvenido el problema de las frecuencias del transporte, que empezamos a reforzar hoy mismo y que habrá que aumentar durante la semana”, opinó el intendente Pablo Javkin sobre el tema.