En conferencia de prensa, el Ministro de Salud de la Nación, Ginés González García -acompañado por el gobernador Omar Perotti y la titular de la cartera sanitaria santafesina, Sonia Martorano, en Casa de Gobierno-, adelantó algunas precisiones de cómo se aplicará el mega plan de vacunación en toda la bota santafesina. Pero claro: las consultas de los periodistas estaban enfocadas en la controversia que se generó con la Sputnik V, tras las declaraciones del presidente ruso Vladimir Putin en las que advirtió -para asombro de propios y extraños- que aún esa vacuna no está recomendada para mayores de 60 años.
Lo que se sabe científicamente a la fecha respecto de la inyección rusa es que los resultados de la fase III -donde se incluyeron a voluntarios mayores de 60 años- todavía no fueron publicados por las revistas científicas especializadas ni los organismos sanitarios competentes. ¿Se aguardarán las conclusiones finales de esa fase (de la vacuna rusa) para inocular a personas por encima de esa edad, o se analiza empezar a vacunar contra el coronavirus sin que estén los informes de su efectividad (sobre mayores de 60)?, preguntó El Litoral al ministro nacional.
“Lo que tenemos son todas autorizaciones de emergencia. La fase III no está terminada para ninguna vacuna. La información que sí está validada hoy (respecto de la Sputnik) es para personas de 18 hasta 60 años. Pero ya se hicieron las pruebas para la gente mayor de esa edad. Entonces, lo que nos cuenta la gente de nuestro gobierno que está en Rusia (ver Relacionada) es que ya fue aprobada (la vacuna) por el comité de expertos ruso. Esa autorización, se supone que estaría antes de fin de año para la franja etaria de 60 para arriba”, respondió el funcionario de Nación.
“No obstante -agregó-, esto no quiere decir que no se pueda empezar a vacunar cuando lleguen (las dosis). Se podrá comenzar a inocular a los trabajadores de salud (menores de esa edad), que son los que están muy expuestos. No hay ninguna postergación. Debemos ser responsables: la gente está esperanzada de que la vacuna llegará, y va a llegar”, aseguró.
La vacunación tendrá grandes desafíos logísticos y de distribución (la Sputnik debe estar a menos 18 grados, con lo cual se debe garantizar la cadena de frío desde los centros de distribución a los vacunatorios, y de ahí al paciente a inocular). “La vacuna y todo el material de protección sanitaria estará a cargo de Nación. Y las provincias deberán poner un enorme esfuerzo del recurso humano para llevar adelante el plan de inoculación”, explicó González García.
Y estimó que el proceso de vacunación masiva será “de no menos de seis meses”. “El contrato (de adquisición de la vacuna rusa) establece que antes del 28 de febrero deben llegar 20 millones de dosis (el todo el país), es decir, 10 millones de personas serían inoculadas (pues son dos dosis)”.
Y respecto de cuántas dosis llegarán a Santa Fe, “la distribución se hará según un indicador de porcentaje que le toca a cada jurisdicción. Trataremos de iniciar la vacunación al mismo tiempo en todas las provincias. Es la intención del presidente de la Nación”.
Adelantó asimismo que hay negociaciones con China por otras dos vacunas, y también por la Janssen (que comercializa la farmacéutica multinacional Johnson & Johnson). “Esta última nos gusta mucho porque es una sola dosis, con lo cual se simplifica muchísimo el mecanismo la distribución”. El problema es que Janssen no tendrá lista su vacuna hasta el segundo trimestre de 2021.
La secretaria de Acceso a la Salud de la Nación, Carla Vizzotti, sostuvo desde Moscú que si bien hasta el momento la Sputnik V no está habilitada para mayores de 60 años, a la espera de que se ultimen los estudios científicos, las autoridades rusas le confirmaron que "ya recomendaron ampliar la edad para vacunar".
"La recomendación hasta ahora con la Sputnik V es vacunar hasta los 60 años porque aún estaban terminando de analizar los datos; pero nos confirmaron que ya recomendaron ampliar la edad para vacunar", sostuvo la funcionaria. Vizzotti se encuentra en la capital de Rusia, donde viajó al frente de una comitiva argentina para cerrar detalles de la adquisición de la vacuna y la logística para traer al país las primeras 300 mil unidades que llegarían antes de que termine el año.