El vértigo es una ilusión de movimiento, puede tener diferentes causas y ser un síntoma de varias condiciones médicas. La identificación y tratamiento tempranos son clave para controlar sus efectos.
Reconocer los diferentes tipos y diagnosticarlos de manera oportuna es esencial para brindar el tratamiento adecuado.
El vértigo es una ilusión de movimiento, puede tener diferentes causas y ser un síntoma de varias condiciones médicas. La identificación y tratamiento tempranos son clave para controlar sus efectos.
En todo el mundo, el vértigo es uno de los síntomas más comunes relacionados con los trastornos del equilibrio. Es importante destacar que no es una enfermedad en sí misma, sino un síntoma que puede ser provocado por diversas patologías.
Francisco Varela, neurólogo, explicó a El Litoral que la causa más común de vértigo a nivel global es el vértigo posicional paroxístico benigno (VPPB), que ocurre debido a partículas presentes en el vestíbulo, una parte del oído interno. Suele manifestarse en la adolescencia y se desencadena con movimientos como girar en la cama o levantar la cabeza. Por lo general, los episodios son breves y durarán sólo unos segundos. Afortunadamente, el VPPB se resuelve en la mayoría de los casos mediante maniobras de reposicionamiento.
“Es importante destacar que, a menudo, este síntoma es atribuido a problemas o inconvenientes cervicales, lo cual conlleva a demoras diagnósticas y terapéuticas”, remarcó el profesional.
Sin embargo, existe otro grupo de pacientes que experimentan episodios recurrentes de vértigo más prolongados, que pueden durar minutos u horas. Según contó Varela, “estos episodios van acompañados de síntomas auditivos, como pérdida de audición, zumbidos en los oídos y sensación de oído tapado. En muchos casos, estas señales están asociadas con la Enfermedad de Meniére, una afección crónica que puede afectar significativamente la calidad de vida de los pacientes”. El diagnóstico temprano es crucial para controlar los síntomas mediante estrategias farmacológicas y no farmacológicas.
Otra asociación común es el vértigo relacionado con dolores de cabeza. “Los pacientes que sufren de migrañas pueden experimentar vértigo, incluso sin tener dolor de cabeza. En estos casos, el vértigo o mareo suele ser parte de un conjunto de síntomas compatibles con la migraña, como náuseas, vómitos, molestias a la luz, ruidos y bostezos. El enfoque en este caso se basa en reconocer y controlar los desencadenantes típicos, además de considerar opciones de tratamiento farmacológico en casos necesarios”, contó el neurólogo.
Por último, Varela destacó que “en casos de vértigo persistente, que dura varios minutos u horas y cuando se acompaña de otros síntomas neurológicos, es recomendable buscar atención médica de emergencia. Estos podrían indicar una condición subyacente más seria que requiera evaluación y tratamiento especializado”.
Dejanos tu comentario
Los comentarios realizados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Evitar comentarios ofensivos o que no respondan al tema abordado en la información.