Danilo Chiapello
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No se trata solo de automóviles.
Es que el fuego provocado por los quema-coches también destruye ilusiones, afecta trabajos y golpea directamente al corazón de distintas familias.
Así está el caso de Rolando, un esforzado carpintero que vive en barrio Los Hornos y que esta madrugada quedó sin su único medio de movilidad tras un nuevo atentado incendiario.
Eran las 5.10 en punto cuando los gritos de un vecino despertaron a Rolando y su familia.
“¡Rolando, se quema tu auto!”, vociferaba el solidario vecino en referencia al viejo Peugeot 504, que se encontraba estacionado en Pje. Echeverría al 6500.
Durante varios minutos el carpintero junto a otros compañeros de la cuadra combatieron las llamas con baldes con agua y hasta con frazadas, hasta que finalmente lograron sofocar el siniestro.
Calvario
En rigor, el incendio del auto fue el capítulo final de un verdadero calvario que viene sufriendo Rolando, a manos de la delincuencia.
“Hace 10 días me robaron la batería del coche. Un poco antes ya me habían sacado la rueda de auxilio. Otra vez me abrieron el auto y me sacaron la caja de herramientas. Ya me robaron 25 mil pesos en herramientas. Todo esto sin contar las veces que rompieron los vidrios.
La verdad es que ya no puedo más. Uno trabaja con criterio, tratando de hacer las cosas bien. Pero este tipo de cosas te tiran para atrás.
“Cómo voy a seguir, no lo sé”, se preguntó. Ahora tengo que salir a conseguir algún coche. No puedo manejarme de a pie”.
“Todo esto ya ha afectado a mi familia. Hace poco apareció un vecino a las 4 de la mañana gritando para avisarme que me estaban robando el auto. Tuve que salir corriendo. A raíz de esos momentos una de mis hijas, que es una criatura, se asustó mucho, y hasta el día de hoy es que no quiere dormir sola”, culminó.
Obra inconclusa
En Pje. Echeverría al 6500 la Municipalidad está realizando un cemento articulado.
Esta obra viene con un atraso cercano a los 6 meses y ya causó más de un dolor de cabeza a los vecinos de la cuadra que, tal el caso de Rolando, se ven obligados a hacer “dormir” sus autos en la calle.
“Esta obra es un desastre porque siempre se interrumpe”, dijeron hoy los vecinos. “Un día dejan de trabajar porque le faltan materiales; otro porque no tienen herramientas, y así... un calvario que ya lleva cerca de un año”, sentenciaron.
Abandonado
Pero ya desde temprano quienes decidieron sembrar el terror incendiando coches habían hecho de las suyas en Los Hornos.
Fue pasada la medianoche que estos desgraciados atacaron y destruyeron un viejo Ford Taunus que se encontraba parado en Pje. Paraguay al 6400, esquina con J. P. López.
Los vecinos del lugar indicaron que dicho vehículo hacía ya mucho tiempo que estaba abandonado en el lugar. Incluso carecía de sus neumáticos y se mantenía “en pie” apoyado sobre cuatro piedras.