De la Redacción de El Litoral
De la Redacción de El Litoral
Un equipo interdisciplinario del hospital de psiquiatría Dr. Emilio Mira y López trabaja desde el fin de semana sobre el cuadro de salud del policía Pablo Cejas, que si bien no está detenido, continuará internado hasta que los médicos resuelvan el alta, indicaron desde la dirección del nosocomio. Al ser considerado un “paciente agudo”, los especialistas esperan su evolución con el correr de las horas, puesto que ingresó en medio de una crisis emocional, el sábado cuando se atrincheró en un comercio y efectuó disparos al aire haciendo graves acusaciones.
“Lo que dispusimos por su propio resguardo fue que sea examinado por los profesionales del Mira y López”, explicó el fiscal del turno Omar de Pedro, quien el sábado dialogó con el acusado.
Además, explicó que “ayer por la tarde dispuse la libertad en cuanto a la parte penal. De todas formas los médicos han hecho una evaluación y dictaminado que corresponde que siga internado hasta que sea realizada la Junta Médica, hasta que se determine si puede o no ser peligroso para sí mismo como para terceros”.
Sin lesionados
A propósito del tenso episodio que se vivió el sábado en la Costanera, el fiscal reconoció que “más allá de la implicancia penal, el objetivo era que nadie saliera lesionado, ni él ni ninguna otra persona. Por suerte eso no se dio y dentro de lo posible todo transcurrió por carriles normales. Cabe destacar que la policía lo aprendhió y nos lo entregó en perfectas condiciones”, agregó el funcionario.
En cuanto a la atribución legal de los hechos protagonizados por Cejas, encuadran dentro de los delitos de “resistencia a la autoridad” e “intimidación pública”. No obstante, De Pedro se encargó de aclarar que las denuncias que vinculan a la policía con el tráfico de drogas no es de competencia provincial, sino federal; y que las decisiones que se tomen en cuanto a lo administrativo son pura y exclusivamente responsabilidad de las autoridades de gobierno.
Por su seguridad
El fiscal De Pedro recordó que eran “aproximadamente las 19.45 del sábado cuando me llama la policía dándome conocimiento del hecho; que Pablo Cejas no cesaba en su actitud y que con algunos disparos al aire se había atrincherado en la zona de la Costanera, allá por la rotonda donde luego fue aprendido cerca de un local muy conocido donde aparentemente había estado tomando desde temprano, aproximadamente 15.30”.
“Yo le ofrecí, a través de la policía que trabajaba en el lugar, que estaba dispuesto a ir a hablar para garantizarle la seguridad pero que se entregara, y me manda a decir que no quería”, recordó De Pedro. “Después me entero que él confiaba en el fiscal Roberto Apullán que es el que le dispuso la custodia, entonces le pedí a Roberto que se acercara conmigo y fuimos los dos juntos. Cuando llegamos cerca de las 9 ya lo habían detenido. Después de eso mantuvimos una charla con él; al principio estaba muy ofuscado, pero cuando vio que estaba Apullán se calmó”, cerró el entrevistado.