Un comerciante de Santo Tomé que el año pasado compró dos lotes en el barrio La Nueva Detroit de Sauce Viejo radicó una denuncia penal la semana pasada, para que se investigue el accionar de una escribana de Santa Fe, así como el proceder del agente inmobiliario que actuó como intermediario en la operación, tras detectar que las escrituras que se confeccionaron eran apócrifas.
El damnificado se presentó ante el fiscal Nº 6, Rubén Díaz; y a través de un escrito que lleva la firma de los abogados Leandro Corti y Guillermo Carbajo, dio cuenta del derrotero que debió atravesar desde que adquirió “de buena fe” los terrenos.
El primer contacto se produjo a fines de mayo de 2012, a través de una inmobiliaria santotomesina “a los efectos de ofrecerme la venta de lotes radicados en la localidad de Sauce Viejo (zona de El Mate), los que conformaban parte del loteo denominado Nueva Detroit”, relató el comprador.
Ante la oportunidad que significaba el negocio, rápidamente se acordó la compra de los lotes Nº 1 y Nº 30 de la Manzana 14 y el 31 de mayo, y se celebró boleto de compra venta.
Insistencia y sorpresa
Si bien todo parecía ir sobre carriles normales, “hubo un aspecto de la situación que me resultó sumamente llamativo, y fue que la parte vendedora y el abogado asesor manifestaron con muchísima insistencia que la escritura debía realizarse con una escribana” de Santa Fe, que no era de su confianza.
Como logró convencerlos para que la operación se hiciera con un profesional de su elección, el 28 de junio de 2012 se celebró el acto de escrituración. En esa oportunidad, el ahora despojado saldó la deuda del 50 % que restaba para abonar la totalidad de la compra de los dos lotes.
Transcurrió un lapso de 30 días, hasta que la escribana “me hizo entrega de la escritura ingresada al Registro de la Propiedad, de la que se infiere que los lotes en cuestión se encuentran inscriptos en fecha 10 de julio de 2012, bajo el Nº 71.243, al Folio 3443, Tomo 782 I, del departamento La Capital”.
Sin embargo, el 10 de septiembre del año pasado la notaria se comunicó con él para decirle que habían llamado desde el Registro de la Propiedad para notificarla de “una serie de irregularidades con el asiento” que era “el antecedente dominial del inmueble” adquirido.
Asientos falsos
Para no perder tiempo, el 14 de septiembre “me presenté en la sede del Registro de la Propiedad de Santa Fe, con el fin de que me recepcionen una declaración” y fue en ese momento cuando se enteró de que “se habían falsificado varios asientos registrales dominiales de diversos inmuebles”, entre los que se encontraban los lotes que adquirió de buena fe.
Para colmo de males, en diciembre recibió un llamado de quien supuestamente “era la propietaria de los lotes en cuestión”. Le explicó que “había adquirido de buena fe y a título oneroso, escriturando los inmuebles”, pero los argumentos no bastaron, ya que en enero de este año se enteró de que los lotes habían sido cercados y ocupados por un tercero, al que denunció por “usurpación” en la policía local.
Como los hechos denunciados se podrían encuadrar en las figuras de “falsificación de documento público agravada” y “estafas”, los abogados Corti y Carbajo elevaron un petitorio para que la causa se acumule a un expediente en trámite en el Juzgado de Instrucción Segunda, de Nicolás Falkenberg, solicitando medidas urgentes y se los acepte como querellantes.
Un caso similar
El 8 de noviembre pasado, otro vecino de Santo Tomé denunció ante la Justicia provincial que compró dos terrenos en 1996 en el loteo La Nueva Detroit, de Sauce Viejo, los que intentó escriturar en septiembre de este año, pero cuando intentó iniciar el trámite se encontró con que se habían realizado dos ventas por escritura pública.
La primera operación se concretó el 21 de diciembre de 2011; y acto seguido se volvieron a vender, firmando escritura pública el 29 de diciembre de 2011 a favor de un tercero.
Ante las sospechas de que allí se habría producido un delito, la fiscal Graciela Parma elevó la denuncia el 12 de noviembre, formulando requerimiento de instrucción ante el Juzgado de Instrucción Segunda.
También en este caso participó de la operación la escribana santafesina recientemente denunciada. Cabe mencionar que la profesional resultó procesada por “falsificación de documento público reiterado” este año por el juez de Instrucción Primera, Jorge Pegassano; pero la Cámara de Apelación Penal revocó dicho procesamiento.