Disputa legal por una mula manca y una yegua tuerta
Los equinos fueron secuestrados a fines del año pasado por trato cruel. Esta semana se conoció un fallo en los tribunales de Vera, en el que se invocó una "mirada jurídica de los animales como personas no humanas".
Archivo El Litoral La veterinaria oficial constató que los animales presentan signos de desnutrición y maltrato físico.
Una mula manca y una yegua tuerta, que se encuentran secuestradas desde fines del año pasado por orden judicial, fueron el centro de una discusión en los Tribunales de Vera, en la cual finalmente se hizo valer su derecho como "personas no humanas" por sobre el de "propiedad".
Así lo entendió el juez Gustavo Gon al rechazar este lunes un pedido de la defensa pública, para que los equinos sean devueltos a su antigua propietaria, la cual asegura que los necesita para trabajar.
"Debemos reconocer, que la jurisprudencia ha logrado captar con mayor premura la solicitud de la sociedad y ha ido, a través de distintos pronunciamientos, otorgado a ciertos animales el carácter de sujeto no humano o ser sintiente en tanto merecen una protección especial", destacó el magistrado verense.
"En este sentido, le asiste razón al fiscal, quien rechaza la devolución de los animales. Más allá como señalara la defensa, y que lo necesita para desplazarse y realizar su trabajo, ha quedado debidamente evidenciado el mal uso y maltrato", cerró Gon.
Gentileza Una yegua zaina de unos quince años que le falta un ojo y una mula blanca de diez años aproximadamente era utilizados para trabajo de cartoneo, fletes de leña y otras changas.
Una yegua zaina de unos quince años que le falta un ojo y una mula blanca de diez años aproximadamente era utilizados para trabajo de cartoneo, fletes de leña y otras changas.Foto: Gentileza
Denuncia y secuestro
La disputa legal comenzó el 21 de diciembre de 2020, cuando vecinos de la ciudad de Vera fueron testigos del trato cruel proporcionado por una mujer cuando uno de los animales se desplomó mientras tiraba un carro de un eje en inmediaciones de la calle Rivadavia, entre 9 de Julio y 25 de Mayo.
La presencia policial sirvió para calmar los ánimos y para darle un respiro a la yegua de 15 años, que recibía estoica los fustazos de su dueña desde el suelo.
Inmediatamente los animales fueron puestos a disposición de la Guardia de Seguridad Rural "Los Pumas", quienes en su carácter de depositarios judiciales se hicieron cargo de las curaciones y alimento.
Nuevo reclamo
Una semana después del episodio -luego enmarcado en la violación a la Ley Nº 14.346, más conocida como Ley Sarmiento o de Crueldad animal-, la dueña del carro reclamó la devolución de los animales ante la fiscalía.
El planteo, mediado por el defensor público Matías Daruich, no tuvo respuesta inmediata del Ministerio Público de la Acusación, por lo que seis meses más tarde, el 1 de junio de este año, solicitaron una audiencia para reiterar el pedido de devolución.
Entre los argumentos ofrecidos por la defensa invocaron que se trata de sus herramientas de trabajo y que no habiéndoles imputado algún delito correspondía su devolución. En tanto la propia ofendida contó que "crió a la yegua de niña y compró una mula", que eran sus "elemento de trabajo" y que "tiene hijos para alimentar".
Gentileza La veterinaria oficial constató que los animales son orejanos de marca , con signos de desnutrición y maltrato físico.
La veterinaria oficial constató que los animales son "orejanos de marca", con signos de desnutrición y maltrato físico.Foto: Gentileza
Animales, no cosas
El fiscal Nicolás Maglier se opuso al pedido. Se advierte que "asimila los animales a cosas" -dijo-, cuando "se ha dado una vertiginosa modificación de la naturaleza jurídica de los animales como personas no humanas" y por ende "no se puede hacer esa interpretación lineal de la defensa, de aludir al derecho de la propiedad".
Y aunque "en el ordenamiento jurídico los animales siguen dentro del concepto de cosas, la jurisprudencia los considera sujetos sintientes". "Estamos ante animales y no son solo cosas", insistió el Dr. Maglier.
Además recordó que la investigación se inició a partir de "una denuncia por maltratos, que ademas es confirmada con fotografías, lesiones y testimonios recogidos"; uno de los cuales relata que "uno de los animales se cayó y se pusieron a pegarle, que los vecinos le gritaron para que deje de pegarles y llamaron a la policía".
Crueldad animal
Finalmente, el fiscal Nicolás Maglier citó a la mujer para audiencia imputativa, celebrada este jueves por la mañana en el MPA de Vera. Ante la presencia del defensor oficial Matías Daruich, el fiscal le atribuyó la violación de la Ley Sarmiento Nº 14.346 por crueldad animal, causa por la cual probablemente se propicie una salida alternativa al conflicto.
"Un fallo novedoso"
"Era la oportunidad de emitir un fallo en consonancia con el desarrollo firme, pero novedoso en materia de derechos de animales", explicó el fiscal de Vera, Nicolás Maglier. Y agregó que "era más importante neutralizar el resultado dañoso que el reproche penal" para la mujer que "es una persona vulnerable".
"Me opuse a la restitución" no porque la pretendida dueña fuera una persona peligrosa o con antecedentes, sino porque está acreditado que "no le proporcionó a los animales el trato debido".
"No se puede lisa y llanamente equiparar un animal a otras cosas secuestradas, como puede ser un televisor", se explayó el fiscal. "Yo hablé de las teorías de personas no humanas" y si bien "son delitos de baja escala punitiva, lo importante es que (los animales) no vuelvan bajo su señorío".
Resultaba "improcedente que se le hiciera lugar a la defensa porque estaban arguyendo que una vez restituidos volverían a ser consagrados a la actividad, cuando está vedado el uso de animales para traccionar carros en gran parte del territorio argentino", cerró Maglier.
En carne viva
El Litoral Un hombre de 28 años fue identificado por el delito de crueldad animal y se le secuestró una yegua y el carro en Recreo - FOTO: Prensa URI
Foto: El Litoral
Este miércoles, efectivos del Comando Radioeléctrico de la ciudad de Recreo detuvieron la marcha de un hombre de 28 años, que en horas de la siesta circulaba a gran velocidad en un carro con tracción a sangre. Lo interceptaron en calle Lehmann y R. Aldao y observaron que la yegua se encontraba transpirada y lastimada. El veterinario policial constató que el animal tenía "bajo peso, los músculos propulsores descarnados, una herida en el pecho por el mal uso de aperos, le faltaba una de sus herraduras en la pata trasera y dado a su estado corría riesgo de vida". Por el hecho el hombre fue trasladado a la Comisaria de Distrito 16°, donde se le labró causa por "maltrato animal Ley N° 13.436" en tanto que la yegua fue trasladada a la Brigada Ecológica.