Por estas horas la apacible localidad de Humboldt perdió su tranquilidad a raíz de un caso de femicidio que ocurrió en plena calle.
El crimen se consumó delante de un niño de 7 años, hijo de la pareja. Minutos después el agresor se entregó en la comisaría.
Por estas horas la apacible localidad de Humboldt perdió su tranquilidad a raíz de un caso de femicidio que ocurrió en plena calle.
Eran cerca de las 7 cuando Noelia Fabiana Ochstadt (37) se trasladaba en bicicleta, junto a su pequeño hijo de 7 años. Como todas las semanas, la mujer pensaba dejar al niño al cuidado de un familiar para luego proseguir ella hasta la carnicería donde trabajaba.
Pero el plan cambió drásticamente cuando apareció en escena una Ford Ecosport que interceptó el paso de la madre y su hijo. Al mando de dicho vehículo se encontraba Walter Gerardo Weinstein (46), ex pareja de la mujer y padre del niño.
De un salto, el hombre descendió del rodado. Con sus manos sostenía una escopeta de doble caño. La tragedia ya estaba en marcha.
Todo ocurrió en cuestión de segundos. La mujer que intentó algún escape. El grito desesperado del niño. Nada de eso logró apagar la furia del femicida que apuntó con su arma y apretó el gatillo.
Fue un solo disparo que impactó de lleno a la altura del pecho de Noelia. La mujer se derrumbó al suelo ya sin vida. Mientras, su pequeño hijo conocía el terror en vivo y en directo.
Minutos después, con la misma frialdad con la que ejecutó el crimen, el hombre volvió a tomar el mando de la Ecosport y condujo hasta la comisaría 5ta. de Humboldt. Estacionó en la puerta y, sin mayores preámbulos, encaró al oficial de guardia a quien le dijo: “asesiné a mi mujer”.
Tras superar el estupor de semejante declaración, los agentes procedieron a detener al hombre. Luego requisaron el interior del coche desde donde secuestraron la escopeta importada utilizada en el hecho. El arma tenía dos cartuchos; uno intacto y el otro percutado.
De todo lo acontecido fue informado el fiscal Martín Torres quien dispuso que el hombre pase a estar en calidad de detenido e incomunicado. Además que por cuestiones de seguridad se lo traslade a la ciudad de Esperanza.
Noelia y Walter habían sido pareja durante años y fruto de esa relación habían tenido dos hijos; uno de 7 y otro de 14 años.
El es un modesto productor agropecuario de la zona mientras que ella, como ya dijimos, se ganaba la vida como empleada de una carnicería.
Desde hace unos meses el vínculo amoroso se había terminado; algo que nunca fue aceptado del todo por el hombre. Mucho más cuando se supo que ella ya había iniciado una nueva relación.
A partir de entonces hubo algunos cruces donde el ahora detenido habría deslizado algunas amenazas.
“Acá la conmoción es muy grande. Imaginen ustedes que esto es un pueblo y este tipo de hechos no ocurren siempre”, dijo Esteban Matievich, periodista de FM Radar, en diálogo con El Litoral. “La primera sensación que tenemos es de tristeza y luego de eso viene la consternación, porque acá todo el mundo se conoce”, agregó.
“Este episodio se consumó en lo que llamamos barrio Sur. Tanto la víctima como el victimario son vecinos del pueblo. La verdad que es algo que nos sorprendió. Se sabía que ellos estaban separados, pero jamás imaginamos un final semejante”, concluyó.