Un aluvión de escalofriantes grupos de WhatsApp aparecieron en la aplicación durante los últimos días. Todavía no está claro quienes los originaron y los manejan, pero se sospecha que pueden estar vinculados con redes de pedofilia.
Trascendieron varios casos en la capital provincial, pero aparentemente ninguno fue denunciado hasta el momento.
Un aluvión de escalofriantes grupos de WhatsApp aparecieron en la aplicación durante los últimos días. Todavía no está claro quienes los originaron y los manejan, pero se sospecha que pueden estar vinculados con redes de pedofilia.
Los casos se multiplican en nuestra ciudad, la provincia y el resto del país. La metodología es siempre similar. Los grupos se llaman "Agreguen gente de nuestra edad", "Unan gente pq si", "Unan a todos", "Tenemos que llegar a 2000" o tienen nombres similares. La idea es captar niños y que cada uno de ellos sume a su vez a sus amigos para completar un desafío de determinada cantidad.
Las víctimas son pequeños de entre 10 y 12 años o apenas un poco más grandes. Los teléfonos celulares en sus manos los hacen blanco fácil. Cuando las invitaciones llegan de parte de sus pares más cercanos, nunca dudan en aceptar.
En la capital provincial se reportaron varios episodios. Los chicos pertenecen a distintas comunidades educativas.
Una vez que el grupo se hace numeroso, empiezan a aparecer imágenes espeluznantes: pornografía, pedofilia, violencia extrema (crímenes, en ocasiones), son algunas de las temáticas.
En otros casos, algún participante -que sería mayor de edad- les pide a los niños que envíen también material similar. Aparentemente, alguna víctima habría recibido dinero por pasar contenido propio.
Posiblemente, menores pudieron haber sido extorsionados luego para que envíen alguna foto o video para no ser "escrachados" por lo que había hecho.
Ante la ola que se registra de este tipo de ataques, es importante más que nunca que los padres estén alertas, que mantengan fluida comunicación con sus hijos y que les adviertan de los peligros relacionados con esta modalidad.
En caso de detectar algún grupo sospechoso, antes que abandonar o eliminarlo se recomienda acudir a cualquier Centro de Denuncias de la provincia o ante el Ministerio Público de la Acusación (puede ser de manera online: https://mpa.santafe.gov.ar/).
Natalie Weber llevó a "Desayuno Americano" una problemática que vivió muy de cerca. Su hija Mía, de 12 años, cayó en un chat de pedofilia, algo cada vez más habitual por el uso temprano de teléfonos celulares en pequeños, señaló la agencia Noticias Argentinas (NA).
Afortunadamente, la modelo se dio cuenta de lo que estaba ocurriendo y pudo alertar a su hija sobre las intenciones del desconocido que la estaba contactando por WhatsApp mediante un chat grupal en el que pedían llegar a los 1000 seguidores.
"A mi hija la sumó un compañerito, pero el creador es el pedófilo. Van sumando chicos y los va poniendo de administrador y la clave es llegar a mil contactos. Una mamá muestra este video y dice 'fíjense porque mi hija está en uno de esos chats'. Lo mira y me dice 'yo estoy en el mismo'", contó la modelo.
"No la reté, ahí me di cuenta que no tiene herramientas para enfrentar un montón de cosas. Me senté y hablé. Después hizo un muy buen trabajo el colegio y vino ella solita a decirme 'mamá, no estoy preparada para tener Instagram'", contó Natalie.
"No llegué a denunciar porque cometí el error de que ella salga del chat y borrar", detalló la modelo, que expuso su caso y se sentó junto a un experto en seguridad informática y un médico sexólogo, que hablaron de los riesgos que hay en redes sociales cuando los niños ingresan desde muy pequeños y tienen al alcance su propio teléfono celular.
"Seis de cada diez niños hablan con desconocidos", remarcaron los especialistas en "Desayuno Americano", al tiempo que compartieron un video que se viralizó en los últimos días entre padres de niños de entre 10 y 14 años, que alerta sobre este tipo de maniobras siniestras para captar menores.
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