.Estaba relativamente tranquila la noche en la Subcomisaría 2a de barrio Santa Rosa de Lima, cuando irrumpió una mujer para denunciar a su nuera.
Cuando la policía encontró a la sospechosa llevaba el arma de fuego en una mochila, con dos cargadores
.Estaba relativamente tranquila la noche en la Subcomisaría 2a de barrio Santa Rosa de Lima, cuando irrumpió una mujer para denunciar a su nuera.
La víctima, de 56 años, le relató al sumariante que la joven, de 25, la había amenazado de muerte con una pistola calibre 9 milímetros.
Inmediatamente, una comisión policial partió rumbo al domicilio de la acusada, donde calle Mendoza corta la Circunvalación Oeste.
Los uniformados se toparon con la acusada en la vía pública, cuando caminaba junto a un pequeño.
Ella llevaba sobre su espalda una mochila de color rosa y los policías le pidieron que les muestre lo que había en el interior.
Para sorpresa de todos, adentro tenía el arma de fuego mencionada, cargada con doce balas y lista para disparar. Además, tenía un cargador extra con la misma cantidad de municiones y otros veinte proyectiles en una bolsita de nailon.
La pistola calibre 9 milímetros era marca Browing y tenía la numeración suprimida.
La joven fue aprehendida y trasladada a sede policial, donde quedó a disposición de la fiscal en turno, la doctora Bárbara Ilera.
La funcionaria del Ministerio Público de la Acusación dispuso que la mujer permanezca detenida y comunicada, y que sea identificada por "amenazas calificadas y portación de arma de guerra".
Ilera también ordenó una serie de medidas, tales como la inspección ocular, la confección de un croquis y el reconocimiento de la pistola por parte de la víctima, entre otras.
En cuanto al hijo de la acusada, la fiscal solicitó la intervención de la Subsecretaría de la Niñez, la Adolescencia y la Familia.