El Litoral
Este lunes por la noche, los amigos del joven lo recordarán con una marcha. Un repaso por las cinco claves de la historia.
El Litoral
Los amigos de Fernando Pastorizzo (20) lo recordarán este lunes por la noche en Gualeguaychú con una marcha: hoy se cumple un mes desde la madrugada en que Nahir Galarza (19) lo mató de dos disparos.
La última discusión
La madrugada del 25 de diciembre fue un día clave según la investigación. En plena Navidad, Galarza y Pastorizzo se vieron y protagonizaron una pelea en la puerta de la disco Bikini, en la que también habría participado una amiga de ella.
El fiscal Sergio Rondoni Caffa --que ahora fue reemplazado por la fiscal subrogante Martina Cedrés-- abonó la teoría de que hubo golpes entre ambos. La noche del 24 "hubo un problema entre ellos, una discusión que se dio fuera de una discoteca y una pelea a golpes", precisó. Por algún motivo --que todavía se desconoce-- decidieron reencontrarse el 29 de diciembre, día en el que Pastorizzo murió.
El arma arriba de la heladera
Marcelo Galarza, el papá de Nahir, tiene el cargo de oficial principal de la Policía de Gualeguaychú. Es uno de los oficiales más antiguos de la provincia: cumplía funciones desde hace 24 años. Había dejado arriba de la heladera de su casa el arma reglamentaria, que su hija usó para terminar con la vida de Pastorizzo. Es una 9 milímetros semi-automática.
En su primera confesión, para probar su culpabilidad, la joven le mostró al fiscal cómo se carga el arma que usó para matar a su novio. Y contó que después caminó hasta su casa y se fue a acostar.
Pero en su última declaración, dio una nueva versión de los hechos. Dijo que fue "un accidente", algo que la querella considera inverosímil, en especial porque la joven tiró dos disparos. Fernando recibió el primero de espaldas. Cayó de la moto en la que viajaba, boca arriba, y recibió el segundo impacto de frente. Ambos fueron en el tórax y los dos le atravesaron el cuerpo.
Una relación violenta
Uno de los argumentos de la defensa de Nahir es que el vínculo con Pastorizzo era violento. "Era una relación enfermiza, de poco menos de 5 años", dijo el abogado de la detenida, Víctor Rebossio, cuando recibió a Clarín en su estudio. "El le pegaba y ella le pegó a él", agregó el defensor, quien precisó que el día del crimen, cuando se fueron hasta la casa de ella en moto "se dieron palos" y que Nahir habría --según su postura-- agarrado el arma del padre para defenderse de una supuesta violencia de género.
El maltrato --de ambas partes-- fue un tema recurrente en las redes sociales, que fueron escenario de cruces entre amigos del chico muerto, por un lado, y personas cercanas a la detenida, por otro. “Lo volvías loco, lo tenías harto hija de p… Le pegabas, lo maltratabas, no lo dejabas vivir en paz! Vas a pagar por todo este dolor”, escribió una amiga de Fernando. Y ejemplos como esos, sobran.
El contenido de los celulares
Los mensajes y llamados de los celulares de Nahir y de Fernando podrían brindar datos sobre la naturaleza de la relación entre ellos, lo que tendría peso a la hora de eventualmente agravar la pena de la acusada por el vínculo que mantenía con la víctima.
Las pericias del celular de Nahir arrojaron que intercambió 104 mil mensajes en un año con Fernando. Dos de esos mensajes la joven se los mandó a su novio a las 5.52 del viernes 29 de diciembre, media hora después de matarlo. Según lo difundido por el diario El Día, el primer texto decía: “La podés cortar?”. Treinta segundos después, le escribió: “Ya te dije que no me vi con nadie”. Además, se supo que la joven desactivó la ubicación de su celular a las 19.15 del 28 de diciembre, el día previo al crimen.
Acceder al celular de Pastorizzo fue más difícil. Al parecer, el chico había activado más de un sistema de seguridad en su teléfono (un Motorola G5 Plus XT1680 que cuenta con lector de huellas digitales) desde que Nahir logró adivinar una contraseña, acceder al teléfono y borrar información de él. Finalmente, los peritos de Gendarmería lograron recuperar al menos parte de la información que Fernando guardaba en su teléfono, a través de la computadora personal del chico, tal como se lo confirmó a Clarín la fiscal Cedrés.
La estrategia de la defensa
Jorge Zonzini, el manager de famosas --como Rocío Gancedo-- fue contratado por la familia Galarza como representante mediático. En las últimas semanas, el hombre difundió fotos de la niñez y adolescencia de la acusada, en un intento por mejorar su imagen, bajo el título de "La transformación de Nahir, la entrerriana más famosa, en su viaje de niña a mujer en 10 fotografías exclusivas".
También se reabrió y cerró en un par de días la cuenta de Instagram de la joven. Y se le creó un perfil en la enciclopedia virtual Wikipedia, que fue dado de baja por sus propios usuarios poco después por "irrelevante".
Días después, Zonzini difundió en su cuenta de YouTube un polémico video bajo el título "Adolescencia que adolesce", que muestra una serie de imágenes de Nahir Galarza y de otros chicos en lo que fue el festejo del día del estudiante de hace unos años. Ahora, se supo que la defensa pidió incorporar como perito de parte al mediático psicólogo Gabriel Cartañá, que participa en varios programas de TV.