Una mujer de Recreo se despertó a la madrugada y se encontró con su vecino arriba suyo, manoseándola no sólo a ella sino también a su hija de 3 años, que dormía al lado. Por este y otros hechos, que van desde tentativa de hurto hasta violencia de género, el joven de 25 años quedó en prisión preventiva.
Se trata de Franco Geremías Scheffer, conocido en Recreo como el "Gordo Gere", para quien el fiscal Esteban Morales solicitó la cautelar de máxima ante el juez José Luis García Troiano. Esto, debido a la amplia gama de delitos que se le imputaron y que el funcionario se encuentra investigando: "abuso sexual simple", "abuso sexual gravemente ultrajante", dos hechos de "lesiones leves", "amenazas" y "amenazas calificadas", "desobediencia de mandato judicial" y "tentativa de hurto calificado de vehículo dejando en la vía pública".
Fuentes judiciales aseguraron que se investiga la participación del "Gordo Gere " en más delitos, que aún no han sido atribuidos.
Algunos hechos se remontan a 2020 y 2021, aunque el más reciente -y por el que tenía pedido de captura- sucedió en febrero de 2022. En la audiencia de este lunes, el defensor público Sebastián Moleón propuso que Scheffer continuara sujeto al proceso pero en libertad, con medidas alternativas. Sin embargo, el magistrado no las consideró suficientes para menguar los riesgos de fuga y entorpecimiento probatorio.
La primera denuncia contra el joven fue radicada por una vecina, que vive a tan solo un par de cuadras de su casa. La madrugada del 16 de febrero de 2020 la mujer dormía junto a su hijita, de 3 años, cuando se despertó sobresaltada.
Cuando abrió los ojos se encontró con una escena salida de una pesadilla. El joven, que por entonces tenía 23 años, estaba arriba de ella, manoseándola. Lo mismo hacía con la nena, que continuaba dormida. Como pudo, la mujer intentó sacárselo de encima hasta que logró echarlo de la vivienda. Lo reconoció como el "Gordo Gere", un muchacho del barrio, y denunció.
Scheffer fue imputado como autor de "abuso sexual simple reiterado en dos oportunidades", tras lo cual recuperó su libertad con restricciones. Dos años después, cuando volvió a caer y se expusieron las evidencias en la audiencia de prisión preventiva (este lunes), el juez García Troiano modificó la calificación legal, agravando la figura a "abuso sexual gravemente ultrajante" en perjuicio de la menor.
Entre su primera detención (por los abusos) y la última (en la que quedó en prisión preventiva), Scheffer fue imputado por dos hechos de violencia de género. El primero ocurrió la tarde del 17 de julio de 2021, cerca de las 18.30, en la casa de quien por entonces era su pareja.
Según detalla la imputación, se le endilgó "haber agredido a su pareja presionando sus manos y arrastrándola por el piso" provocándole lesiones en distintas partes del cuerpo. Cuando las dos hijas y la hermana de ella intentaron intervenir, él extrajo un revólver de su cintura, les apuntó y amenazó.
A los gritos, les advirtió "que no le tenía miedo a nadie, ni a la policía ni a los parientes, que llamen a quien quieran, que él no se iba a ir y que tenía para responder a cualquiera". Lo denunciaron, y la mujer lo dejó, pero Scheffer no lo entendió.
Tres meses después, la noche del 27 de octubre, el "Gordo Gere" la interceptó en la calle y la persiguió hasta su vivienda mientras le decía, entre otras cosas "que ella estaba viva porque él quería". Además, le manifestó que si no volvía a estar con él debería "atenerse" a lo que pudiera pasarle a su familia, "amedrentándola e intentando agredirla físicamente". No logró golpearla gracias a que una de las hijas de la mujer intervino.
Encontrándose nuevamente bajo medidas alternativas, el 22 de febrero de este año Scheffer agredió a su expareja. La mujer se encontraba en la casa de su padre, cercana a dónde el imputado reside, cuando él le propinó un golpe de puño en el rostro, causándole una contusión a la altura del ojo izquierdo.
Ella volvió a denunciarlo, y desde la fiscalía emitieron una orden de detención que se efectivizó recién los últimos días de abril cuando la policía lo encontró. Como al momento de la aprehensión el fiscal en turno era el Dr. Esteban Morales, la causa quedó en sus manos.
El funcionario del MPA le imputó este último hecho a Scheffer, y agregó uno del 31 de enero de 2020 que había quedado sin atribuir: sustrajo una Corven Energy 110cc. azul que estaba estacionado en la vereda de un comercio de Gálvez, y momentos más tarde fue capturado por vecinos.
Tras solicitar la acumulación de todos los legajos, Morales solicitó que el imputado quedara en prisión preventiva. El juez José Luis García Troiano consideró que los riesgos procesales no podían menguar de otra forma, por lo que impuso la cautelar de máxima sin plazos.