Motochorro santotomesino preso por cometer siete robos en una semana
La policía lo apresó el viernes pasado, después de que asaltara a una mujer y a su hijo de 6 años, en la esquina de la plaza Belgrano. El raid delictivo se extendió del 20 al 28 de enero.
Facebook Elemii Desantoto es el perfil de Facebook que una de las víctimas descubrió y sirvió para identificar al delincuente.
17:45
Una decena de hechos delictivos se acumularon en tan sólo una semana en el prontuario policial de Emiliano Nael Nizzo, que fue detenido el viernes de la semana pasada en Santo Tomé y que este martes recibió su tercera condena, en un juicio abreviado en el que reconoció su responsabilidad.
El acuerdo, que incluye una pena de un año y ocho meses de prisión de cumplimiento efectivo y declaración de reincidencia para él, fue alcanzado entre la fiscal Rosana Peresín y el defensor oficial Nicolás Mosconi; y ratificado mediante sentencia oral por el juez penal Sergio Carraro, en una audiencia celebrada en el subsuelo de los tribunales locales.
Entre los delitos que se atribuyeron al santotomesino de 27 años cuenta el encubrimiento por el robo de una moto cometido el año pasado y nueve hechos contra la propiedad, entre los que se destacan siete robos callejeros, pero también una tentativa de hurto calificado por escalamiento y una violación de domicilio, todos cometidos entre el 20 y el 28 de enero de este año.
Archivo El Litoral El juez Sergio Carraro dictó la sentencia oral esta semana en la que lo declaró nuevamente reincidente.
El juez Sergio Carraro dictó la sentencia oral esta semana en la que lo declaró nuevamente reincidente.Foto: Archivo El Litoral
Sorpresa y amenaza
Según la reconstrucción realizada por la fiscal Peresín, Nizzo cometió la mayoría de los hechos acompañado por otra persona y bajo la modalidad del "motochorro". Como parte de su estrategia criminal, merodeaban distintas zonas de la ciudad hasta que elegían a sus víctimas, las cuales por lo general eran sorprendidas y amenazadas verbalmente en plena calle con frases como "dame el celular o te meto un tiro".
Celulares, carteras, mochilas, bolsos y bicicletas eran el botín habitual de Nizzo, a quien también lo responsabilizaron de un importante robo en una casa de familia, ubicada a pocas cuadras de su propio domicilio.
El 20 de enero de 2022, en horas del mediodía, aprovechó que los dueños de una casa de López y Planes al 2200 salían, para romper la puerta principal y llevarse dos televisores de 32' y 42', el monitor de una computadora, una suma de dinero estimada en $ 60.000, una bicicleta rodado 29 y lencería por un valor aproximado de cien mil pesos, además de documentación personal.
A partir de ese día y casi ininterrumpidamente cometió una seguidilla de delitos, a toda hora y lugar. El 21 de enero en horas de la madrugada, junto a un cómplice, abordaron a dos mujeres que estaban en Macia y San Martín. Haciendo ademanes de que tenia un arma bajo la ropa, les sustrajeron un celular y una billetera con documentación personal.
Un par de horas más tarde, también en moto y acompañado, hicieron caer de la bicicleta a un muchacho que transitaba por Hipólito Irigoyen y Vieytes. En la caída, aprovecharon para patearlo en el suelo y quitarle su mochila, en la que llevaba un cargador de celular y $ 800.
Ese mismo viernes, en horas de la siesta, fue sorprendido en solitario, adentro de un auto VW Fox, que estaba estacionado en el patio de una casa de pasaje Rocca al 3000. Para ingresar, Nizzo debió trepar un tapial de dos metros y medio y no pudo completar el atraco sólo porque la hermana del dueño de casa lo sorprendió y comenzó a gritar, ahuyentándolo.
Por las cámaras
El lunes siguiente -24 de enero-, las cámaras de seguridad de un comercio de López y Planes al 2500 lo muestran a Nizzo y otro sujeto, intentado abrir el portón de calle de un vecino y se advierte que también saltó un tapial para ingresar a la propiedad, pero no se produjo robo.
El séptimo delito de la lista fue un robo callejero, nuevamente en moto y acompañado, cuando el miércoles pasado -26 de enero- asaltaron a un hombre que caminaba por avenida Richieri y Córdoba. Eran las siete y media de la tarde y sin embargo avanzaron: "dame el celular o te meto un tiro", le ordenaron, llevándose un Samsung J-4.
Guantes y botines
Los tres últimos robos ocurrieron el viernes 28 de enero, entre las 21.50 y las 22.15. En ese lapso, los motochorros abordaron a una mujer en Hipólito Irigoyen y López y Planes, a la que también amenazaron prometiéndole que la iban a matar si no cooperaba. Se llevaron un bolso Nike con efectos personales.
Minutos después atacaron a un ciclista de 15 años, en Hipólito Irigoyen y Aristóbulo del Valle, al que despojaron de una bicicleta rodado 26 y una mochila donde llevaba los botines y guantes de arquero.
Y el último ocurrió en la esquina de la plaza Belgrano, en Libertad y Gaboto, donde una mujer que iba en bicicleta con su hijo de 6 años paró a mandar un mensaje de texto y fue víctima de los maleantes. Y si bien alcanzaron a robarle el bolso, sus pertenencias fueron halladas a pocos metros del lugar y devueltas por un vecino que advirtió la maniobra de descarte. A los pocos minutos una patrulla lo puso tras las rejas y a disposición de la justicia.
Escape
El 13 de noviembre de 2021, a las 4.15 de la madrugada, una patrulla detuvo a Nizzo que circulaba en contramano por calle Castelli y López y Planes de Santo Tomé, a bordo de una moto Corven con pedido de secuestro por robo, del 7 de septiembre del mismo año. Lo palparon de armas con resultado negativo y mientras verificaban el sistema Cóndor para obtener los datos de la moto Nizzo salió corriendo por calle López y Planes y se terminó fugando. El hecho encabeza la lista de diez por el cual resultó nuevamente condenado.
Reincidente
Dos condenas previas pesan sobre los hombros del joven de 27 años. Nizzo fue condenado por primera vez el 4 de agosto de 2019 a la pena de 4 años de prisión de cumplimiento efectivo; y el 25 de noviembre de 2020 recibió 1 año y 10 meses más de prisión con declaración de reincidencia por primera vez.
"Pude reconocerlo"
Una de las víctimas se tomó el trabajo de sumergirse en lo más profundo de las redes sociales en busca de los delincuentes que lo asaltaron, con resultado positivo porque pudo dar con uno de ellos.
"Pude reconocer uno de los masculinos porque publique en una red social lo que había pasado por si alguien encontraba la documentación y me enviaron por WhatsApp una foto de unos chicos que andan en la zona robando", declaró el damnificado, cuya colaboración resultó de gran importancia para asociar los distintos sucesos.
Pero además, contó que el mismo día del robo, reconoció en la calle al otro delincuente, puesto que seguían merodeando la zona. Hasta le sacó una foto con el celular.