La ciudad salteña de Orán fue noticia en febrero de este año cuando el auto de una policía estalló en una estación de servicio y reveló algo impensado: tenía 20 kilos de cocaína escondidos que volaron por los aires. Este jueves, casi 7 meses después, la Justicia sentenció a seis años y medio a la mujer.
Sofía Esther Chaparro, la sargento de la Policía Bonaerense, fue condenada por el delito de transporte de estupefacientes agravado al tratarse de una funcionaria pública, en calidad de coautora. Además, la inhabilitaron para ejercer el cargo por el mismo tiempo de la pena.
Su pareja, Fabián Giménez, también se encuentra acusado de participar en el hecho.
La defensa de la juzgada y la fiscal de la Sede Descentralizada de Orán, María del Carmen Núñez, llegaron a un acuerdo de juicio abreviado a raíz del material probatorio.
El juez ordenó confiscar el auto Ford Focus blanco que utilizó la agente.
El 7 de febrero pasado, la imputada, oriunda del partido de La Matanza, viajaba en el vehículo junto a sus tres hijos menores de 9, 13 y 14 años cuando se detuvo en una estación de servicio, emplazada en la avenida Palacios y calle Nahuel Huapi de la ciudad salteña Orán.
Tras bajar del auto, Chaparro le solicitó al playero que cargue el tanque de GNC por $1.500, y en ese momento explotó la parte trasera del Ford Focus, hecho que quedó registrado por las cámaras de seguridad
Tras el siniestro, un polvo blanco quedó suspendido en el aire y muchos paquetes rectangulares de los que después se constató que era cocaína, aparecieron esparcidos en el piso.
Sólo uno de los niños sufrió una lesión leve en el ojo y fue asistido por el servicio de emergencia.
La mujer aseguró no saber de la presencia de la droga en el vehículo. Además aclaró que estaban volviendo a su casa de La Matanza y habían visitado al padre de sus hijos horas atrás.