Carlos Retamal
Ocurrió antes de la medianoche del jueves. La Policía recogió 28 vainas servidas en la vereda de Corrientes, entre Urquiza y Tucumán. Hay al menos 16 impactos en la fachada del inmueble. No hubo heridos.
Carlos Retamal
Alrededor de las 23:30 horas del jueves, una seguidilla de tiros que parecía interminable resonó en calle Corrientes al 400, en pleno centro de Rosario, demostrando que las balaceras no tienen freno ni límites. Esta vez, el blanco fue la sede de la Asociación Empleados de Comercio de Rosario.
“Creemos que este ataque está relacionado con la inseguridad que genera tanta zozobra tanto en Rosario como en todo Santa Fe y que afecta en última instancia la tolerancia de la comunidad con quienes conducen”, sostuvo el secretario general del gremio, Luis Battistelli.
"No tuvimos amenazas, coacciones, ni internas. Hemos sido elegidos para algún fin que no nos queda claro, o bien por equivocación", agregó.
Pasadas las 23:30, varios llamados al 911 denunciaron un ataque a tiros en calle Corrientes. A los pocos minutos, varios patrulleros llegaron hasta el lugar y constataron que el frente de la sede social, que ocupa gran parte de la cuadra, tenía una importante cantidad de impactos.
Los investigadores recogieron 28 vainas servidas, y constataron al menos 16 impactos en vidrios y aberturas.
"Sinceramente no sabemos si se equivocaron o fue para generar violencia e impactó cerca de las elecciones en un lugar muy concurrido que es Corrientes y Urquiza donde transitan 5.000 personas por día", sostuvo por su parte Silvana Crocci, prosecretaria de la Asociación Empleados de Comercio.
En base a datos que fueron aportados por personal de seguridad privada que tiene la Asociación (que custodian el interior), se presume que el autor de la balacera fue una persona que se desplazaba en una moto de color blanca.
En la zona hay una importante cantidad de cámaras, tanto públicas como privadas, que serán revisadas para intentar dar con el autor de los disparos.