Para la fiscalía, Mónica Aquino puede estar "escondida, secuestrada o muerta"

"La desaparición de Mónica Aquino en gran medida es responsabilidad de este grupo familiar", dijo la fiscal Alejandra Del Río Ayala este miércoles, al concluir su pedido de prisión preventiva para los hermanos Pérez, exconcubino y excuñado de la mujer de 29 años cuyo paradero se desconoce desde el 5 de mayo.

Mónica Estefanía Aquino es una trabajadora sexual de 29 años, que vive en el barrio Varadero Sarsotti junto a sus cuatro hijos y se encuentra desaparecida desde la madrugada del viernes 5 de mayo de este año. La denuncia de paradero fue radicada 48 horas después -el 7 de mayo- por Hugo Jesús Pérez (30), quien hasta hace poco fue su pareja y que con el correr de las horas se convirtió en el principal sospechoso junto a su hermano Mario Daniel Pérez (31) y la madre de ambos.

Los tres fueron detenidos esta semana, y este miércoles el juez en lo penal de Santa Fe, Luis Octavio Silva dispuso la prisión preventiva para los dos varones, que fueron imputados en coautoría por el delito de "explotación de la prostitución ajena agravada"; y sólo en el caso de Hugo Pérez -expareja de Aquino- se le atribuyó la autoría de "promoción de la prostitución ajena agravada" y "lesiones dolosas, calificadas por el vínculo y por violencia de género".

En cuanto a la madre de ambos, María Rosa A., fue arrestada este martes y sería imputada el próximo viernes por la fiscalía, en una audiencia en la que también tendrá tratamiento la prisión preventiva, según indicaron fuentes judiciales.

"Tres posibilidades"

A propósito de las hipótesis que se barajan sobre el paradero de la mujer, "ella puede estar escondida, secuestrada o muerta. Son las tres posibilidades que se me ocurren" dijo la fiscal Del Río Ayala este miércoles. No obstante aclaró que "yo no les voy a atribuir la desaparición de Mónica", dado que se trata de un delito de competencia Federal.

Para sostener tal afirmación, la fiscal relató con detalle el derrotero de Aquino como víctima de explotación sexual por parte de su círculo íntimo, al que calificó de "cafiolos y rufianes". Al menos desde 2017 la mujer que ahora se encuentra desaparecida, era trasladada por su pareja a las esquinas de San Lorenzo y Amenábar y luego a Moreno y Urquiza, donde era prostituida.

Cuando Hugo Pérez estuvo preso -tiene tres condenas y fue declarado dos veces reincidente-, la tarea la realizaba su hermano Mario y también la madre de ambos, a la cual "testigos vieron arrastrando a Mónica de los pelos de una parada a otra".

Denuncias previas

Para la fiscalía, Mónica Aquino era víctima de "opresión y violencia" en todas sus formas. "Amenazas, violencia física, encierro, impedimento de vínculos familiares y de contacto con redes de contención", dan cuenta del "contexto de violencia extrema" al que estaba sometida.

Un año atrás, en mayo de 2022, Mirta Machado, madre de la joven desaparecida, radicó una denuncia contra el concubino de su hija, que la había amenazado de muerte a ella y su familia. Preocupada por la situación de aislamiento de Mónica, la madre relató que un día su hija le contó que se tuvo que escapar de la casa donde vivía con los Pérez para poder llevar a una de sus hijas al Hospital de Niños porque estaba enferma. Y que Hugo Pérez le dijo que "si no volvía en 10 minutos la iba a matar".

Tanto la habían alejado de su familia, que ni su propia madre sabía que Mónica era prostituida, sino que se enteró por una sobrina que le contó que la solía ver en una de las "paradas" del barrio Sur.

Víctima renuente

Por esa denuncia de la señora Machado y otro episodio ocurrido en julio, cuando Aquino debió escapar a la casa de una amiga, las autoridades intentaron citarla para avanzar en la investigación, pero "fue muy difícil contactarla y lograr que se acerque aprestar una declaración", reveló Del Río Ayala.

Finalmente la entrevistaron el 17 de agosto del año pasado, ocasión en la que dijo que "trabajaba por su cuenta" y minimizó el hecho de que "él la había golpeado", haciendo referencia a su pareja Pérez.

"Se han entrevistado a familiares, vecinos y trabajadoras sexuales" que compartían parada con ella y "todos cuenta lo mismo", en referencia al tato violento y al sometimiento de los Pérez.

El episodio de violencia física más reciente que se registra ocurrió el 20 de abril pasado, cuando Mónica debió recibir asistencia médica en un efector público por una herida punzo cortante en uno de sus brazos. Según se supo después, el agresor había sido Hugo Pérez, y para ello utilizó una cuchilla que se encuentra secuestrada y que cuenta con rastros de sangre.

"Testigos vulnerables"

Por el lado de los hermanos Pérez, la abogada del Servicio Público Provincial de la Defensa Penal (SPPDP), Eliana Echaniz, rechazó el pedido de prisión de la fiscalía y propuso alternativas a la prisión preventiva, las cuales fueron descartadas por el juez Silva en su resolución.

En tal sentido, el magistrado dio por acreditado el hecho que les fuera imputado a los Pérez, así como su presunta responsabilidad en ellos, al menos en esta instancia del proceso.

A su vez, hizo hincapié en los riesgos procesales que implicaría dejar a los acusados en libertad. Entre otros, refirió al entorpecimiento probatorio y a la "necesidad de que los testigos declaren libremente", en especial aquellos que se presentan como "vulnerables" como ser las trabajadoras sexuales.

Tal como lo indicara la fiscal Del Río Ayala, el juez Silva señaló que todavía resta tomar las entrevistas en cámara Gesell a tres de los hijos menores de edad de Aquino, especialmente a las dos nenas de 8 y 10 años, que actualmente se encuentran viviendo con su abuela materna.

Y por último, se refirió a "las mentiras de Pérez a la hora de hacer la denuncia de paradero" en cuanto a datos que se le solicitaron para la búsqueda y aportó respuestas erróneas o esquivas.

Pedido de paradero

La Secretaría de Derechos Humanos de Santa Fe solicita cualquier información sobre Mónica Estefanía Aquino, de 29 años, que fue vista por última vez en la ciudad de Santa Fe, el 5 de mayo de 2023.

Según consta en la denuncia, la mujer oriunda de Santa Fe, tiene tez trigueña, ojos marrón oscuro, cabellos castaños y 1,54 de estatura. Entre sus señas particulares, se menciona la presencia de dos lunares en el cuello.

En su búsqueda intervienen la Agencia de Investigación Criminal (AIC)- Agencia de Lucha contra la Trata y Violencia de Género y la Fiscalía de Violencia de Género, Familiar y Sexual (Gefas) del MPA Regional I.

Ante cualquier dato por favor contactarse con la Secretaría de Derechos Humanos y Diversidad de Santa Fe (Mendoza 3443, de la ciudad de Santa Fe o Balcarce 1145 de la ciudad de Rosario), al correo electrónico [email protected], o a los teléfonos 3425357756 y 0800-5553348.