El drama de Hugo Schnell (80), el verdulero apuñalado por un delincuente la noche del miércoles 10 del corriente, marcha a rumbo firme hacia un final feliz.
Así lo confirmó el director del hospital Cullen. Felicidad plena entre sus familiares y amigos.
El drama de Hugo Schnell (80), el verdulero apuñalado por un delincuente la noche del miércoles 10 del corriente, marcha a rumbo firme hacia un final feliz.
Al cabo de 7 días de tensión y angustia, durante las cuales el comerciante estuvo alojado en la Unidad de Terapia Intensiva del hospital Cullen, en la mañana de este jueves los médicos decidieron pasarlo a una sala de cuidados generales.
Consultado al respecto el doctor Bruno Moroni, director del hospital Cullen, precisó que “el paciente se encuentra cursando post operatorio cirugía por herida de arma blanca con lesión cardíaca. Evolución favorable. Pasa a sala general”.
Por su parte Patricia, una de las hijas de Hugo, narró a El Litoral que “esto es una alegría enorme. No se puede poner en palabras la felicidad que sentimos todos”.
“Ayer ya nos habían adelantado los médicos que lo iban a sacar de terapia intensiva. Respondió bien a todos los procesos. Primero le retiraron el oxígeno asistido, luego los drenajes del corazón y los pulmones y todo siguió perfecto”.
“Además él se muestra con muy buen ánimo. Tiene apetito y hace bromas. Ya se sentó en la cama y charló con todos”, reveló.
Como ya dijimos fue la noche del miércoles 10 cuando Hugo quedó en medio de una maldita jugada del destino.
Faltaba poco para terminar la jornada en su verdulería ubicada en Gral Paz 7600 cuando Hugo se retiró para cerrar la puerta de un depósito, a la que fue a colocarle dos candados, justamente “por seguridad”
Como una broma macabra, al volver de dicho trámite encontró que había un desconocido sacando el dinero de la caja registradora. Al gritarle para que se vaya el delincuente sacó a relucir una cuchilla con la que le asestó 5 puñaladas, una de ellas que le atravesó el corazón de lado a lado.
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