Ante los reiterados hechos de inseguridad en la escuela Vigil de Sauce Viejo y particularmente luego del último robo que ocurrió en estos días, la directora decidió dormir en el establecimiento en un intento por frenar la ola de delincuencia.
Esta vez los malvivientes se llevaron computadoras, tablets y equipos de música. El edificio sufrió además daños en aberturas y rejas.
Ante los reiterados hechos de inseguridad en la escuela Vigil de Sauce Viejo y particularmente luego del último robo que ocurrió en estos días, la directora decidió dormir en el establecimiento en un intento por frenar la ola de delincuencia.
Al respecto, Jesús Patiño, miembro de la cooperadora escolar, habló con El Litoral sobre la situación límite que viven: “Dentro de estas últimas 48 horas sufrimos otro robo y efectivamente están faltando cosas muy importantes: cinco netbooks que usaban los chicos, tablets, equipos de música para actos, también una notebook que habían mandado desde Nación para distintos tipos de trabajos prácticos. Ni hablar de los daños que le hicieron al establecimiento, han forzado las rejas, las aberturas de aluminio, sus cerraduras” comenzó lamentándose.
Además, agregó que hace pocos días ya habían vivido una situación parecida: “Hace unos días atrás, durante la noche alerta un vecino que habían abierto una de las puertas de la dirección y en esa situación llega la policía y se habían llevado las cosas, pero la policía logra, no atraparlos, sino que los persiguen y descartan lo que llevaban. Lo único que se llevaban en ese momento fueron cinco netbooks”.
“A todo esto, ante situación la directora preocupada les pide a ver si pueden tener algún tipo de refuerzo, porque quedó muy vulnerable la escuela. Lo que manifiesta la autoridad de seguridad es que no tienen móviles o personal para patrullar la zona y a todo esto recibe la comunicación de la guardia urbana municipal de que sí se iban a ocupar, pero nunca llegó esa asistencia y hoy nos encontramos devuelta con otro robo” explicaba Patiño.
Ante la pregunta sobre qué intentarán hacer para revertir la situación, el representante de la cooperadora contestó: “La verdad es que la directora quiere dormir en la escuela prácticamente. Ella confió en que no iba a pasar más esto y volvió a suceder” cerró.