El asesino golpeó a Daniela Cejas para someterla y luego la aferró con fuerza del cuello, haciendo una llave con sus brazos. Así, sintió como la vida de la mujer se iba apagando de a poco. Esperó con paciencia hasta asegurarse de que la había matado. Dejó tirado el cadáver en el piso de la sede de la Asociación Civil Generar, una ONG dedicada a asistir a víctimas de violencia de género en la que la propia Daniela militaba. El crimen ocurrió el sábado 18 de enero de 2020 y días después fue detenido Javier Eduardo Sen, un hombre de 48 años con quien Daniela mantenía una relación sentimental. Este hombre fue imputado por femicidio y se le dictó la prisión preventiva por dos años. Este miércoles, la Justicia extendió ese plazo y el sospechoso seguirá tras las rejas mientras avanza el proceso rumbo al juicio oral.
La audiencia se celebró en horas del mediodía, en los tribunales de la capital provincial. Se hicieron presentes el padre y otros familiares de Daniela, su ex marido incluido. Todos pidieron que Sen siga preso.
El acto fue presidido por el juez Gustavo Urdiales y la fiscal fue Ana Laura Gioria, quien hizo la solicitud de que la prisión preventiva se prorrogue por un año más, teniendo en cuenta que la investigación permanece abierta y hay medidas que se siguen realizando. Tanto para la funcionaria del MPA como para los abogados querellantes, los doctores Carolina Walker y Matías Pautasso, los riesgos procesales siguen intactos. La elevada pena en expectativa (perpetua) hace pensar que el acusado podría intentar darse a la fuga si se le diera la oportunidad.
El magistrado entendió que este planteo era válido, teniendo en cuenta la complejidad de la causa, que no cuenta con testigos directos del hecho.
Javier Sen, el imputado, siempre fue un hombre violento, según sostiene la fiscal del caso. "Tiene un antecedente condenatorio de mucho tiempo atrás y múltiples denuncias por amenazas y lesiones. Todo esto habla de una persona con un perfil violento", señaló tiempo atrás la funcionaria.
Daniela lo había conocido en la asociación, porque él se acercaba a colaborar. Ella atravesaba una crisis matrimonial y terminó entablando una relación sentimental con el hombre, con quien se encontraba todos los sábados por la mañana en la sede de la entidad, ubicada en calle 4 de Enero al 6600, en barrio Jardín Mayoraz.
Para la fiscal y la querella, está claro que ese sábado 18 de enero de 2022 se encontraron en la Asociación, discutieron, él la golpeó y luego le quitó la vida asfixiándola. Sobre el motivo, presumen que él quería formalizar la relación y ella no. En la escena del crimen, sólo faltó el celular de ella. Él borró toda conversación que había mantenido con la víctima.
Sen fue detenido días más tarde. En ese lapso, él fue al velorio de Daniela, se abrazó con familiares y participó de las marchas que se realizaron para pedir justicia.