La historia de una mamá que encontró en la poesía el consuelo para sobrellevar la pérdida de su hijo
Una historia de amor y resiliencia que, a través de la poesía, busca trascender el dolor y recordar que el amor puede ser más fuerte que cualquier obstáculo.
Su historia está marcada por la llegada de su primer hijo, Félix.
Rosario Caminos es una mamá que transformó el dolor en poesía. Su historia está marcada por la llegada de su primer hijo, Félix, quien nació con complicaciones y vivió solo unos meses. A pesar del dolor, Rosario decidió escribir un libro para contar su experiencia y compartir su proceso de sanación con otros. “Apgar Cero” es su obra, una recopilación de poemas y reflexiones que narran ese corto y duro camino junto a su hijo y que será presentada el próximo sábado 9 de noviembre en la Feria del Libro de Santa Fe.
Todo comenzó en el momento de nacimiento de Félix, cuando los médicos le hicieron la prueba de Apgar, un examen estándar que evalúa el estado de salud de los recién nacidos en los primeros minutos de vida.
Esta prueba, realizada al primer y quinto minuto tras el nacimiento, mide cinco signos vitales: frecuencia cardíaca, respiración, tono muscular, reflejos y color de piel. Un puntaje perfecto es 10, lo que indica que el bebé está en condiciones óptimas. Sin embargo, en el caso de Félix, la puntuación fue cero, un indicador de que el bebé no respondió al nacer. "Él nació muerto, y al reanimarlo ya había tenido daño cerebral", relató Rosario en una nota con el diario El Litoral.
Rosario encontró una forma de revivir los momentos vividos con Félix y de reflexionar sobre el duelo.
La situación era completamente inesperada para Rosario y su esposo, quienes habían tenido un embarazo sin complicaciones. Rosario llegó a la semana 41 de gestación, y su ginecóloga decidió inducir el parto. "El embarazo fue óptimo", contó. “Fuimos a una inducción, porque estábamos en la semana 41 y mi ginecóloga había decidido esperar tranquilamente hasta ahí”. Sin embargo, en el sanatorio, se presentaron situaciones que más tarde ella identificaría como negligencias.
Rosario recuerda cómo una partera joven fue quien asistió el parto y, a pesar de que ella comenzó a sentirse mal y a tener vómitos, los latidos de Félix no fueron controlados a tiempo. "Recuerdo que vi en la pantalla cómo los latidos bajaban a 80 por minuto. Fue cuando la partera comenzó a monitorearlo, pero ya era tarde", explicó.
Los médicos lograron reanimar a Félix, pero ya había sufrido daño cerebral irreversible. Durante los tres meses que Félix pasó en la unidad de cuidados intensivos neonatales (NEO), Rosario y su esposo comenzaron a enfrentar la realidad de lo que significaba su situación. "Al principio solo pensábamos que un día iba a abrir los ojos y todo iba a mejorar", recordó Rosario, quien esperaba alguna señal de recuperación. Pero con el tiempo, se hizo evidente que el bebé no reaccionaba, y los médicos confirmaron que el daño cerebral era grave. A pesar de todo, Rosario y su esposo mantuvieron la esperanza, creyendo en que Félix encontraría alguna forma de mejorar.
Fue en esos momentos de incertidumbre y dolor cuando Rosario comenzó a escribir. Su primer impulso fue pedir apoyo a través de las redes sociales, publicando una foto de Félix y pidiendo a sus conocidos que rezaran por él. La respuesta fue inmediata. "Recibimos un amor y apoyo inmenso de gente que no conocíamos, que se solidarizó y acompañó nuestra historia", relató. Para Rosario, esas muestras de cariño y solidaridad fueron una fuerza inesperada que la ayudó a sobrellevar los días difíciles en los que su hijo seguía internado.
A pesar del dolor, Rosario decidió escribir un libro para contar su experiencia y compartir su proceso de sanación con otros.
A medida que Félix mostraba secuelas y los médicos realizaban estudios, Rosario encontró en la escritura una manera de ordenar sus emociones. "Yo ya le había escrito un cuaderno durante el embarazo. Después, cuando estuvimos en casa y Félix tenía internación domiciliaria, seguí escribiendo y de a poco los textos fueron tomando un tono poético", explicó. La poesía, según Rosario, le permitió expresar lo que no podía entender ni explicar con palabras simples, transformando su dolor en un canal creativo. "Fue el libro que escribí más rápido en mi vida", confesó, "porque fue una necesidad de sacar, de transformar, de sublimar".
“Apgar Cero”, el libro que Rosario presentará en la Feria del Libro, es el resultado de esa necesidad de sanación. A través de la poesía, Rosario encontró una forma de revivir los momentos vividos con Félix y de reflexionar sobre el duelo. "Es un canal más, no es lo único, pero siempre ayuda", compartió. Para ella, el mayor cambio fue descubrir que la vida continúa, aunque el dolor siga presente. “Saber que la vida sigue es el cambio más grande”, expresó, convencida de que las experiencias profundas como esta ayudan a encontrar una conexión más fuerte con lo trascendente.
La primera página del libro explica el significado de “Apgar Cero” y cómo esta prueba marcó el primer examen en la vida de Félix, uno que no pudo superar. Rosario, sin embargo, decidió compartir su historia para que otros, que quizás hayan pasado por situaciones similares, encuentren un espacio de identificación y consuelo.
Para quienes deseen conocer más sobre el libro o adquirirlo, Rosario invita a seguir la cuenta de Instagram.
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